La tormenta de ayer por la tarde, aunque de corta duración se abatió sobre Lanús con un verdadero diluvio, granizo y fuertes ráfagas de viento, que a pesar de su brevedad causó inconvenientes y en algunos casos destrozos como muestra el negocio de avenida 9 de Julio al 1800, con el toldo y la marquesina destruidos.