domingo, 3 de diciembre de 2023

Los fondos de Anses son del pueblo, no de los funcionarios de turno


por Carlos Reale*

Respecto al gobierno electo que está por asumir funciones. Sería bueno advertirles que nuestro país, su soberanía, sus instituciones, su idiosincrasia, sus costumbres, su integración, su organización, su patrimonio cultura, trabajo, ciencia, derechos y garantías y todo otro aspecto que regla nuestra Constitución Nacional, le pertenecen al pueblo que los votó y a los que no.  Nadie está a la cola, es del pueblo en su conjunto, por lo que merece el debido respeto y cuidado.  Que sólo se les ha concedido el honor y privilegio de conducirnos, tomar decisiones y representarnos en los términos del Contrato Social citado por el barón de Montesquieu y Jean Jaques Rousseau. Vale entonces recordarles que el dinero de la Anses y de las cajas particulares de retiros de cada profesión o actividad, no les pertenece en ningún modo.  Eso debe quedar en claro en atención a la falta de experiencia y conocimiento que suponen y quedaría a la luz de sus declaraciones, muchas veces contradictorias y desconcertantes. ¡Ese patrimonio les pertenece a los pasivos, porque son sus propios ahorros en términos de ley los que dieron y dan sustento a esas cajas, en tiempos en que fueron trabajadores activos pero que aún siguen aportando solidariamente al sistema!

 Los pasivos, jubilados, retirados y  pensionados perciben su haberes en función al sistema que adoptó el estado nacional a mediados del siglo pasado, que aunque no les guste o quieran proyectar algún otro como los que ya tuvieron lugar en otra gestión, por la que denotan alguna simpatía o devoción la cual  derivará en perjuicios para los trabajadores y jubilados, sepan que este es el que tenemos y funciona

bien en líneas generales. No pretendan quitarnos la escalera al final del camino y que si hay disfunciones sólo habrá que corregirlas o adecuarlas racionalmente a los tiempos que corren. Y sepan que son haberes y beneficios merecidos por quienes hemos aportado durante toda nuestra historia laboral y más aún, más allá del régimen previsto por ley, no se trata de una dádiva o limosna, es nuestro derecho, y el de nuestras familias. Así desde que fue ley a mediados del siglo XX, y estamos en el XXI. Nadie en su sano juicio quisiera volver al XIX o antes. Creo que el pueblo argentino todo, abarcando también a los extranjeros que habitan nuestro suelo conforme a las leyes, aspira a que la gestión venidera pueda destacar buenos resultados al final de su mandato, ya que el tiempo es lo más valioso con lo que contamos en términos de vida, y no está para desperdiciarlo. Dios y la Virgen los acompañen e iluminen su gestión de gobierno y podamos mejorar la impresión que nos viene dando a muchos de nosotros a través de sus declaraciones. 

     (*) Licenciado en Seguridad