“La curiosidad mata al gato”, dice el refrán y váyase a saber qué quiso descubrir el gatito que subió a lo más alto de un poste de luz en la calle Sayos al 3500. La familia llamó desesperada al municipio, y allá fue un equipo de Primera Respuesta de Defensa Civil que con la hidrogrúa pudo rescatar al gatito del poste y devolverlo a sus familares.