por Lisandro Martinez*
El capitalismo es un sistema imposible de reformar
Las elecciones 2023 permitieron a la periodista Camila Dolabjian completar una investigación donde surge “un sistema de creación de partidos políticos que se llevan miles de millones de pesos del estado, sin necesidad de sacar ni el 1% de los votos. Un mismo grupo de personas crea sellos partidarios, los presta a terceros para que puedan anotarse como candidatos y gestiona el dinero estatal para la impresión de las boletas. La trama incluye facturas a nombre de empresas que no existen o de firmas pertenecientes a los mismos apoderados. Estos profesionales de los sellos de goma han estado involucrados en los armados de figuras importantes como José Luis Espert, Pichetto, Amalia Granata, Cintia Fernández, Guillermo Moreno, Alejandro y Cesar Biondini” (La Nación 12/8/2023).
El balance electoral de la izquierda: PTS: 440.000; PO/MST: 186.000; MAS: 85.000; Politica Obrera: 62.000; Total: 773.000.
En esta elección 4 partidos de izquierda no se unieron en un frente único y sumaron 773.000 votantes, el 2,18% del padrón cifra un tanto menor a la del 2011 cuando se constituyó el FIT con la campaña de “El milagro por Altamira” que significó un 2,55% (entre el PO, PTS e IS), ya que no había posibilidad de quebrar la persecución ideológica del estado sin concretar esa alianza.
El retroceso electoral tiene entre otros puntos a revisar que el movimiento de desocupados liderado por la izquierda no fue galvanizado ni convencido políticamente y votó a otros candidatos, no a los propios.
Está planteado por la derechización del régimen político del FMI, que los ataques que vienen van a necesitar la unidad política y de acción del conjunto de la izquierda y los trabajadores
para enfrentar la eliminación de conquistas históricas, con un congreso obrero y de la
Once millones no fueron a votar
Según Página 12 del 12/8/2023 el padrón total era de 35.400.000 votantes pero en las elecciones generales del domingo más de 11.000.000 de electores no fueron a votar (La Nación 14/8/2023); a eso hay que sumarle que entre el 2,9% y el 7,9% (entre 1.000.000 y 2.500.000) de los ciudadanos en condiciones de votar de todo el país lo hicieron en blanco, sin apoyar a ningún candidato. Uno de los registros más bajos de votantes desde 1983.
Con los datos oficiales confirmados por la Cámara Nacional Electoral, la participación a nivel nacional fue del 69,6%.
1.148.342 votos en blanco
Los datos oficiales muestran que el voto en blanco fue del 4,55%. Esta proporción es superior al promedio (2,8%) de las elecciones presidenciales desde 1983. Con lo que la primera expresión de las elecciones son el voto en blanco, el no ir a votar o impugnarlo; este voto bronca suma en total 12.148.342 que superan “al peluca” Milei, como lo llama la prensa española (www.publico.es 14/8/2023), por lo que “La Libertad Avanza” quedó en segundo puesto.
Milei representante de la casta obtuvo el segundo lugar con 11.116.352 votos
Milei, seguidor de Menem y con el recetario de Cavallo, se afanó las banderas y consignas populares surgidas en 2001. Sus acólitos corean: “que se vayan todos” y Milei se raya cuando propone que “hay que echar a la clase chorra que hunde el país” ya que esto incluye a sus socios y a él mismo. En medio del Argentinazo retumbaba: “Chorros, chorros devuelvan los ahorros”, dirigido a los bancos.
El estafador y embustero afana las consignas de las masas que lucharon en las calles contra la burguesía nacional que quebró el país, pretendiendo rescatar a los explotadores. Veinte años después usa las consignas históricas para aplastar al pueblo. Milei fue el candidato más votado y es un emergente de la crisis capitalista que ladra y ladra y habrá que ver si cuando muerda no pierde la cabellera y los dientes postizos en la lucha. El derechista quiere retornar a 1835. Milei representa a la empresa Corporación América de Eduardo Eurnekian, quien amamantó al aprendiz de brujo y lo financió por años. El holding Corporación América entiende que un gobierno de dictadura contra el trabajo puede darle grandes réditos económicos, quitando derechos y súper explotando la mano de obra.
Milei es empleado de Eurnekian, por lo tanto es parte de la casta. El más votado también le afanó letra a reaccionarios como Carlos Rosenkrantz, juez de la Corte Suprema, con quien comparte la especie que “como los gobiernos no destinan recursos para satisfacer todas las necesidades, hay que impugnar el dicho que donde existe una necesidad nace un derecho” (www.perfil.com 2/6/2022).
El primer candidato a diputado nacional en la PBA de La Libertad Avanza es Alberto “Bertie” Benegas Lynch, un veterano agente de los fondos de inversión. Fue 10 años ejecutivo del Banco Santander de Argentina en la Banca Comercial y durante 12 años director general de Universia Argentina, del mismo grupo. Sus referentes políticos son Ronald Reagan y Margaret Thatcher y valora a Carlos Pellegrini y Marcelo T. de Alvear.
Milei fue denunciado por inversionistas por promocionar a Coinx, una plataforma de criptomonedas que estafó a inversores (hoycrito.com 23/8/2022). Como reaccionario y misógino dice que “el cambio climático es una mentira socialista”. Se opone al aborto legal sancionado en Argentina desde 2020” y cree que la educación sexual es parte de una agenda postmarxista que destruye a la familia.
Otras propuestas copiadas de Cavallo son: Reducir los impuestos y recortar el gasto público, cobrar el uso del sistema de salud público, arancelar la educación, privatizar las empresas estatales, eliminar los ministerios de Salud, Educación, Medio Ambiente y 8 ministerios más.
El New York Times hace notar sobre las propuestas de Milei: "Sus políticas económicas estarían conformadas por un paquete de austeridad que es más de lo que el FMI le impone a la Argentina".
Él y su candidata a vicepresidente Victoria Villarruel, abogada defensora de la dictadura genocida, insinuaron que relajarían las leyes de tenencia de armas, prohibirían el aborto legal y permitirían la venta de órganos humanos, un ejemplo de carnicería que según Milei no le compete controlar al gobierno.
Milei quiere pasar por la prueba ácida de enfrentar a las masas y derrotar a los trabajadores: Ni los milicos ni Macri pudieron.
(*) De Política Obrera
