Ayer se produjo un revuelo importante cuando los pacientes de la Unidad Sanitaria Natiello se impacientaron ante la falta de atención por más de cuatro horas. Y lo mismo había sucedido hace una semana. Es que la doctora Matilde Fernández pidió permiso -y lo logró por parte de su jefe “Lito” Lopez- para hacer “unos trámites” que le insumieron desde las 8:00 hasta las 12:30, sin importarle que durante esas cuatro horas y pico la unidad de Martinto 1198 en Chingolo, quedara sin atención médica, con sólo una enfermera a cargo. Y lo increíble del caso es que el 20 de este mes sucedió lo mismo: Se tomó la Fernandez con la venia de Lopez, toda esa mañana. Los gritos de los pacientes se oían desde la calle.