Es el primer municipio en dictar la ordenanza de protección a equinos
Con la presencia de veintidós concejales se realizó ayer la sesión extraordinaria convocada para el tratamiento de convenios, bajas registrales de automotores, aceptación de donaciones y comodato. Estuvieron ausentes Víctor De Gennaro y Karina Nazábal. Pero la expectativa estaba puesta en dos expedientes, uno de los cuales no fue tratado porque no recibió aún el dictamen favorable de la comisión y aguardará que ello suceda. Es el que establece el censo de los “trapitos”, denominados asistentes de estacionamiento y la asignación de las cuadras en las que se desenvolverían.
El proyecto que provocaba la mayor atención es el de la abolición del trabajo de la especie equidae en todo el distrito. La mayoría de las asociaciones de proteccionistas que actúan en Lanús, unidas bajo el lema: “No más TAS”, vienen luchando para lograr la abolición de la explotación y el maltrato de los equinos, que son utilizados por los carreros, sin compasión, y que muchas veces terminan con caballos que caen y mueren en las calles de Lanús, como consecuencia de falta de alimento, vacunas, cuidado y exceso de peso en el carro que arrastran. Por eso estaban los rescatistas asistiendo a la sesión. La ordenanza se aprobó. Lanús es el primer municipio en dictar la norma que los protege
Los concejales que hablaron al respecto hicieron gala del acuerdo al que pudieron llegar, sin contar que desde el Frente de Todos intentaron modificar, sin mayor éxito, el contenido de la ordenanza. Pero sí logaron incluir en una comisión de seguimiento, el “Observatorio de Protección Animal no Humano” que se conformará, a un representante de los recuperadores urbanos.
A veces hay que hacer acuerdos para lograr los votos.
Un poco de historia
Y en este tema es dable hacer un poco de historia. Permítanme hacerlo en forma personal
porque fui parte de ella. Todo comenzó en el año 2008 cuando el reclamo de una proteccionista, Susana Lauro -voluntaria de APRE- llegó a los medios para hacer público el maltrato de los caballos. Llamó a mi programa radial para contar lo que estaba pasando y la cantidad de caballos lastimados y muertos como consecuencia del trabajo que los obligaban a hacer y durante varias emisiones nos contó los casos de los que eran testigos, la lucha por rescatarlos de tanta impiedad y la sordera de las autoridades municipales frente al problema. Es que el intendente Manuel Quindimil había decidido ponerles un número a los carros que circulaban para tenerlos “registrados” pero permitir que siguieran circulando. El tema del maltrato quedaba fuera.Llegó Darío Díaz Pérez y la circulación de los carros había aumentado. El medio La Defensa publicaba sus reclamos. Con Susana y sus compañeras, que hacían denuncias y se paraban con carteles en la puerta del HCD para pedir por el “No más TAS”, teníamos en la radio el lugarcito para poner en evidencia la problemática, a la que Silvano Lanzieri, en su emisora FM Espacio, se sumó en su programa matutino. Díaz Pérez no le daba importancia al tema. La aparición en escena de Julián Álvarez en los últimos días de ese intendente hizo crecer la esperanza de los proteccionistas, alentados por las promesas de quien confiaba en ser el próximo intendente. Pero eso no se dio. Los votos de los vecinos cambiaron el signo político del oficialismo y fue Néstor Grindetti el elegido.
En el Concejo Deliberante, Oscar López elaboró el primer proyecto de ordenanza que prohibía la circulación de los carros a caballo y propuso la utilización de otro tipo de vehículos. Al poco tiempo, Lauro presentó otro similar. No progresaron y los carros proliferaron. Los concejales peronistas/kirchneristas de todos los tiempos se oponían a “quitarles el medio de subsistencia” a los carreros. Cambiarles el vehículo no era posible porque, según se decía, no había medios económicos para reemplazarlos. Y los carreros tampoco querían hacerlo.
Pero las proteccionistas no se iban a amilanar. Un grupo, al que se agregaron nuevas asociaciones como Cinco Corazones Rescate Equino, Vecinos de Lanús en Defensa de los Animales y el siempre presente veterinario Edgardo Di Salvo (Aluisa), se reunió con Lanzieri y le pidió que los ayudase a confeccionar una nueva ordenanza. Él se entrevistó con Grindetti primero y posteriormente con Kravetz y los interesó en el tema. Frente a la aceptación y luego de 6 o 7 meses de reuniones para tratar de incluir todos los puntos de vista, sugerencias y posibilidades se elaboró el proyecto que ayer se aprobó como ordenanza. Ahora viene su implementación.
Lanús es el primer municipio en dictar la norma que protege a “estos seres sintientes, incapaces de defenderse por sí mismos y, por ende, moralmente sujetos de derecho”.
Cuando se aprobó, las proteccionistas ni siquiera pudieron aplaudir. Algunas de ellas lloraban. Los caballos, en Lanús, no morirán tirando de los carros.
Esperan ser libres.
Marta Santos
