Osvaldo Di Gaeta le pregunta al municipio si había necesidad de reformar la placita de Ocampo y Drago, en Lanús oeste. “Derribaron parte de la historia", dice Gaeta y ruega "que ese mástil espero que tengan la delicadeza de no tocarlo, tiene más de 110 años, lo forjaron Cecilio Alonso, Cecilio Perez y Salvador Aprea. Los escudos son artesanales, hechos a mano”, señala. Y reprocha que las autoridades municipales “no fueron capaces de averiguar qué había abajo, donde un día se pudo una botella con los nombres de los que hicieron la plaza. Vinieron con una pala mecánica, y arrasaron con todo. Estaba impecable, quizás hay que justificar gastos”, dice y aconseja que “si tienen tantas ganas de trabajar vengan a arreglar las calles de Escalada, donde no son pozos, son cráteres. Perdón a las generaciones que nos precedieron, a mis amigos que ya no están".