El director general de Emergencias, Roberto López (foto) entre sus múltiples tareas, se desempeña como docente en Tecnicatura en Emergencias, y como en el SAME Lanús faltan médicos en las ambulancias por lo poco que se les paga, no tuvo mejor idea que reemplazar a los galenos por técnicos. Esto conlleva un problema: Si el SAME recibe una llamada de Código Rojo, o sea de extrema gravedad, y concurre a asistir al paciente un técnico, y por ejemplo se encuentra con una persona infartada, tiene que llamar en su apoyo a un médico pues el paramédico no puede recetar ni aplicar medicamentos. Es de suponer que cuando llega el profesional reclamado, el enfermo haya pasado a mejor vida. Pero además se agrega otro problema que ahonda el malestar en las huestes sanitarias del distrito y es que los técnicos cobran mucho más dinero por su prestación de 14 horas por turno que los médicos por su guardia de 24 horas.