por Lisandro Martinez*
La historia en la piel
Para Política Obrera, fundada en 1964, “el peronismo se agotó en 1955, perdió todo progresismo en noviembre de 1972 y completó su circuito con la masacre del 20/6/1973 cuando volvió Perón”. Política Obrera confirmó su tesis donde había asegurado: “Perón volverá al país solamente para estrangular el ascenso de la clase obrera”, y así sucedió cuando el clasismo se tornaba incontenible.
Triple A
Los escribas del peronismo -en general- ocultan que la Triple A fue planificada en Puerta de Hierro. López Rega frente a Robert Hill, embajador yanqui en España, expuso sus teorías a instancias de Perón: “Debido a las culpas de la oligarquía, un río de sangre seca circula bajo el subsuelo de Argentina”. Y añadió: “Después de tomar el gobierno el peronismo necesitaría una milicia armada para reprimir a sus enemigos”. (Ezeiza, Horacio Verbitsky 1985 pág. 27). Perón admiraba el Somaten español, un organismo parapolicial de la Alta Edad Media que actuó durante la dictadura de Primo de Rivera, una organización de alcahuetes y verdugos de sus propios vecinos instalada en la aldeas.
En 1973 José López Rega fue ungido ministro de Bienestar Social por “el tío” Cámpora a pedido del general. “El Brujo” comenzó a rodearse de militantes que “quisieran exterminar a
Manuel de Anchorena fue designado embajador en Reino Unido y logró se enviaran 200 subfusiles Sten MKII que venían con silenciador.
El secretario personal y ministro de los presidentes Cámpora, Perón e Isabelita, López Rega, creó y coordinó la AAA para eliminar a la izquierda del movimiento peronista.
López Rega y el jefe de la Policia Federal, Alberto Villar, organizaron la Triple A durante el gobierno interino de Lastiri en 1973. López Rega desvió fondos del Ministerio de Bienestar Social para financiar la organización.
El 23 de septiembre de 1974 Perón fue elegido presidente y el 25 de septiembre fue asesinado José Ignacio Rucci, secretario general de la CGT. La investigadora Julieta Rostica sostiene: “La competencia entre Rucci y López Rega por liderar la derecha peronista terminó el 25/ 9/1973, con el asesinato de Rucci. La autoría de los Montos fue utilizada por López Rega que legitimó la creación de “escuadrones de la muerte”.
El primer atentado firmado por la AAA fue el 21/11/1973 cuando el senador radical Hipólito Solari Yrigoyen fue gravísimamente herido por oponerse a la reaccionaria Ley de Asociaciones Profesionales que impulsaban Perón y la burocracia sindical. Se supone que el atentado fue dirigido por el jefe de la Policía Federal, Rodolfo Eduardo Almirón, quien también organizó el crimen del cura Carlos Mugica. Sobre el atentado a Solari Yrigoyen, las pericias de Policía Federal señalaron “sus autores son profesionales, la carga explosiva es la clásica de la OAS, grupo paramilitar francés en la guerra de Argelia” (Revista El Descamisado – año 1 N°28, 27/11/1973).
El 1 de octubre, en una reunión convocada por el presidente del Consejo Superior Peronista, Raúl Lastiri y el ministro del Interior Benito Lambí y en presencia de Perón que asistió como presidente electo, el consejo se declaró en “estado de guerra” contra los “infiltrados marxistas del movimiento”.
La exaltación al líder impide a los amanuenses “leales” ilustrar a la juventud sobre el gobierno de la Triple A, que hizo contrarreformas al código penal para condenar a prisión a los obreros que ocuparan fábricas y sancionó una ley de asociaciones profesionales contraria a los intereses obreros. También avanzó contra las ideas “disolventes”: El 4/1/1974 la Policía Federal allanó en capital las librerías Fausto, Atlántida, Rivero y Santa Fe, arrestando a empleados por difundir libros. Algunos de los prohibidos eran: “La boca de la ballena” de Héctor Lastra; “Territorios” de Marcelo Pichón Riviere; “Sólo ángeles” de Enrique Medina y “The Buenos Aires affaire” de Manuel Puig. Los libros fueron secuestrados.
Para los panegiristas de Perón resulta que el intento de copamiento del ERP del regimiento de Azul de 19/1/1974, fue lo que desbordó al anciano presidente. Pero hacía ya 5 meses que la AAA había practicado una masacre el 20/6/1973 en Ezeiza, coordinada por López Rega desde el avión que traía a Perón a la Argentina. Además se cumplían 7 meses del primer atentado de la AAA a Solari Yrigoyen. Por el intento de copamiento en Azul, Perón le pasó factura “por desaprensivo” al gobernador de PBA, Oscar R. Bidegain, un militante de la Tendencia Revolucionaria.
Entendemos que los casi septuagenarios escribas peronistas y vaticanistas intentan dejar el legado de sus experiencias militantes pero consideramos insano que se intente ocultar la filiación derechista de los gobiernos de Perón e Isabelita, sostenidos ambos por la Triple A.
Estos esforzados escribas intentan también desodorizar al sumo pontífice a pesar de la creciente pedofilia en la iglesia y las desapariciones de sacerdotes durante la dictadura, donde el ahora papa desconoció a sus hermanos como el apóstol Pedro a Jesús. A través de sus escritos quieren cargar las tintas sobre los errores de la juventud peronista y hasta encuentran que hubo: ¡Montoneros que se quedaron con Perón! a pesar de que "el viejo" en su mensaje les señaló que si se quedaban lo hacían arrodillados sobre granos de maíz. La plaza se vació cuando se cayó la careta.
El 1/5/1974 no quedó ni el loro en Plaza de Mayo por las provocaciones derechistas de Perón contra los jóvenes. Sí hubo “montos” que decidieron quedarse fue con Guardia de Hierro, o la Jota Perra (JPRA, un invento de Julio Yessi organizador de la AAA, no había cabida para cabezas con criterio propio. En las calles la Triple A salió a cazar “zurdos y comunistas”. El 28/2/1974 en Córdoba, Perón dio un golpe de estado el “Navarrazo”, de “saneamiento ideológico” volteando al gobernador Obregón Cano y a su vice “el negro” Atilio López, a quien el 16/9/1974 secuestran y ametrallan en Buenos Aires.
(*) Del Partido Obrero Tendencia