Un episodio que pinta de cuerpo entero al cuerpo sanitario municipal se dio el sábado por la noche en la Unidad Sanitaria Lanús Oeste. Allí tocó el timbre un matrimonio para avisar que desde un patrullero habían “tirado” en la vereda de la sala a un borracho herido. La médica y la enfermera -únicas almas presentes en la sala- fueron a atender al hombre pero el tipo, muy ebrio, se puso violento. Las sanitaristas entonces pidieron una ambulancia pero no tuvieron suerte: Este fin de semana hubo una sola ambulancia para atender a los 500 mil habitantes de Lanús. Entonces la médica trató de comunicarse con la directora de Emergencias, Miriam Gonzalez (foto) que nunca les atendió la llamada. Luego se enteraron el motivo: ¡La inefable Gonzalez -una jubilada que igual sigue "trabajando" en ese importantísimo cargo- no atendió el celular porque estaba en una fiesta de la Agremiación Médica de Lanús! ¿Y el patrullero que "tiró" al borracho?
En otro orden: ¿Sería mucho pedir que el Centro de Monitoreo haga un rastreo de las cámaras instaladas en la unidad Sanitaria de 25 de Mayo esquina 14 de Julio para ubicar al patrullero que “tiró” al borracho herido a la puestas de esa sala?
