SOLICITADA
Campaña de pronunciamientos: convoquemos un Congreso Obrero
La crisis política recorre al gobierno y a la oposición patronal que no presenta una salida para la clase obrera, para desocupados ni jubilados. Los macristas en 4 años dejaron un tendal de despedidos. Luego de dos años los K y el PJ tampoco dan solución para los trabajadores y los sueldos son de hambre. Los pejotistas/K repusieron en el gabinete a un enemigo de la clase obrera y sus reclamos. Aníbal Fernández es uno de los responsables del asesinato de Kosteky y Santillán (2001) y fue en 2010 quien armó la emboscada de Barracas donde asesinaron a Mariano Ferreyra para fortalecer el negocio trucho en los ferrocarriles, manteniendo a 3000 trabajadores en negro con salarios al 50% de lo que se pagaba por
convenio, cuya diferencia se la morfaba la Unión Ferroviaria.Quienes gobiernan no quieren resolver los problemas del trabajador y en cambio se vuelven a comprometer con el FMI para continuar pagando una deuda ilegítima e ilegal, contraída por la dictadura y reivindicada por todos los gobiernos que siguieron. Esta deuda hay que desconocerla.
En nuestro país hay 20 millones de laburantes, jubilados y desocupados, viviendo abajo de la línea de pobreza; si los trabajadores, jubilados y desocupados no nos ponemos al frente de una salida propia esto no se soluciona. Faltan miles de viviendas, cloacas y agua potable. La urbanización barrial no está en la agenda del gobierno. La pandemia fue un claro ejemplo de la caída de la salud pública que únicamente mantuvieron a flote los esforzados trabajadores de la salud, con salarios de hambre.
Las elecciones del 14/11 no resolverán nada. Necesitamos una política propia de los trabajadores frente a la crisis de poder de los partidos patronales. Para eso es necesario impulsar una campaña nacional para realizar un Congreso de trabajadores ocupados, jubilados y desocupados, que genere mediante el debate un programa de las reivindicaciones necesarias para salir de este pantano y un cronograma de acción para imponer nuestra oposición a la reforma laboral y jubilatoria del FMI, la burocracia sindical y la UIA.