por Salvador Baratta*
En las últimas elecciones, vimos cómo la gente volvió en dos años a cambiar su voto. Se podría hacer una lectura simplista, como que la gente maduró y ya no se ata a ningún candidato. Pero la verdad es sólo una: La gente vota con bronca, con odio, a una clase política que la tiene cansada, harta de mentiras de promesas incumplidas de ver siempre los mismos candidatos prestarse las listas y ser cada día más millonarios. Por algo la interna del Frente de Todos la ganó Julián Alvarez, por ser joven. No sé si será mejor pero por lo menos puede llegar a ser distinto. Los pesados del peronismo se refugiaron en la lista de Omar Galdurralde, y fueron un ancla: la gente no los puede ver más. Hagan un favor, retirense a disfrutar lo que lograron con tanto esfuerzo y sacrificio, me olvidaba de aclarar de parte del pueblo. Toda la vida viviendo de la política y encima nos dejan adentro a sus herederos para que los sigamos manteniendo. A ustedes los de Juntos, mucho festejo, pero no escuché a nadie decir que el votante no nos votó porque “propusimos algo”. Es más, no sabemos qué proponen economía, seguridad, educación, etc. La gente los voto porque se sintió engañada y defraudada, así que no se hagan cargo del triunfo, es más muestren vergüenza porque los que están hoy es porque ustedes fueron muy malos cuando les tocó gobernar. Moraleja: la ciudadanía cambió su voto y volvió a votar con la pirinola al que estaba en modo opositor para castigar al que está gobernando, pero sabiendo que ustedes no fueron mejores. Muchos de Juntos dicen en su discurso “estamos aprendiendo”, pero dejen de aprender en la función, prepárense antes y si no no se metan, porque sus errores mientras ustedes aprenden los pagamos muy caro nosotros. El pueblo está muy cansado.
(*) Ex concejal de Lanús