por Lisandro Martínez*
Según la Cámara Electoral votó el 68% en una elección en pandemia y es el porcentaje más bajo desde 1983. Los votos en blanco (4,4%) ocuparon el 4to lugar y 5 listas aglutinaron el 84,5% de los votos (www.chequeado.com 12/09/2021).
El 13/9 los hombres de negocios saludaron el sometimiento de la Nación Argentina subiendo sus acciones en EEUU.
Desde hace más de 65 años siempre fue el PJ quien al final de sus gobiernos tambaleantes y de derecha, abrió paso a golpes de estado y dictaduras contra el pueblo (Rojas/Aramburu, la Triple A, Videla/Agosti/Masera). La conducta del PJ fue imponiendo mojones: Rodrigazo, Leyes represivas y anti derechos sindicales que aseguraran un régimen de opresores. La burocracia sindical en 1952 decidió aumentar los ritmos de trabajo en un “Congreso de la productividad”, repudiado por lo más consciente del movimiento obrero de la época que entendió se intentaba imponer la superexplotación. Esa iniciativa fue resistida como también lo fue el intento entre 1954/55 de suspender la vigencia de las comisiones internas y cuerpos de delegados de fábrica.
Ni que decir en 1974 con la ley de trabajo 20744 escrita por un burócrata, el ministro
Entre bueyes...
En 2011 Macri y CFK en CABA ganaron en sus respectivas categorías y no se sintieron a disgusto ni denunciaron los planes políticos del otro, estaban cómodos en comunión de ideas, por lo tanto y como saben quienes conducen carretas “entre bueyes no hubo cornadas”. El propio FT y sus medios crearon ahora una imagen “positiva” de Larreta, quien se pronunció contra las indemnizaciones por despido horas antes de las PASO, sin que Cristina ni Alberto dijeran nada ni denunciaran el nacimiento del macrismo sin Macri engendrado por Larreta.
No es de extrañar que en esta jornada de las PASO, por la impotencia del FT que comparte con la derecha el bajar sueldos, quitar indemnizaciones, no pagar vacaciones, aumentar 5 años la edad para jubilarse, algunos votantes de Alberto hayan decidido votar por “los hijo e’ puta originales” (Milei o JxC).
Que hayan ganado la elección los sátrapas que proponen bajar salarios, abolir indemnizaciones y leyes laborales, después de haber gobernado 4 años con miles de despidos y precarización del trabajo, pone de relieve que nadie puede dejar de tomarlos en serio y preparse a resistir el ataque organizando una lucha de masas.
El kirchnerismo perdió por los mismos motivos que el macrismo la elección 2019: mataron de hambre al “popolo” y querían su apoyo. No hay trabajador consciente alguno que crea que Larreta, los K, o Milei van a solucionar su actual situación ¿Quién podría suponer que Alberto F. el vendedor de AFJP (curro de Jubilaciones privadas), pueda tener algún interés en derrotar la inflación? Massa hace rato se postró ante los buitres.
Los trabajadores fueron forreados por AF en mayo de 2020 cuando se reunió con el G6 y no con enfermeros, médicos, UOCRA, UTA, panaderos, jubilados, docentes, etcétera, sectores donde ninguno llega a fin de mes. Millones de trabajadores en blanco (con trabajo registrado) ganan salarios de pobreza
Si el FT hubiese enfrentado con acciones de masas al poder económico, acaudillando y movilizando al pueblo, la inflación que destruye el salario se contenía en las calles. Pero nada de eso está en la agenda del nacionalismo burgués que vive y se nutre como parásito en las entretelas de los usureros financieros.
La base social del albertismo/cristinismo está condenada a ser una masa de maniobras, porque el gobierno actúa concesiva y temerosamente frente a los explotadores e igual pierde por goleada. Los grandes grupos atacaron a un gobierno que les teme y arruga ante ellos. Pero en la base social del FdT están parte de los sepultureros de los usureros internacionales, sólo hay que movilizarlos apelando a su conciencia.
El sonoro sopapo popular
Alberto Fernández y su equipo dicen que quieren privilegiar a trabajadores y jubilados frente a los banqueros. Pero son los banqueros los que se llevan las riquezas en pala, aun con pandemia, mientras laburantes, viejos y niños morfan salteado. En estas condiciones, el gobierno recibió lo que se merece: el sonoro sopapo electoral.
La firma de acuerdo con el FMI fue aprobada por oficialismo y oposición. Pero no es asunto concluido ni un bálsamo financiero estabilizador. Los pensadores señalan que de las peores encerronas se sale usando otra perspectiva.
El Fitu, “la izquierda que se une per se”, obtuvo el 5%.
Los trabajadores debemos cambiar la mano y salir con un programa que se proponga instalar una república soberana de laburantes.
1. Salario mínimo, vital y móvil, jubilaciones y pensiones de $130.000 indexados
2. Expropiar Vicentín y Moloca para que el gobierno obrero intervenga en el sector exportador, decidiendo precios.
3. Estatizar la hidrovía Paraná recuperando millones de u$s del saqueo.
4. Pase a planta permanente de miles y miles de tercerizados del ferrocarril y de otras empresas como Edesur, etc.
5. Reincorporación de los cesantes ferroviarios y estatales de la era Macri.
En un mes de campaña no pudimos instalar a Politica Obrera
Nuestra denuncia sobre el acuerdo de “todos y juntos” y el FMI pegó fuerte. En el primer día de campaña impactamos en “A dos Voces”. Estuvimos en cientos de FM y el 8/9 en A dos Voces a las 22:00 donde nos dieron aire a las 00:15 cuando la audiencia cae al 5%. En las 6 provincias donde legalizamos, nuestra boleta casi desapareció de las mesas de votación. El Estado (Correo Central) no garantizó la boleta 322 y los punteros robaron las pocas que aparecían. Desde primera horas vecinos avisaron que se abrían mesas sin nuestra boleta, faltaban aca y allá, reponíamos y al rato volvían a faltar. Los incidentes en Tucumán con Gendarmería que impidió entrar nuestros fiscales a escuelas, ilustra nuestra denuncia.
Aunque no pasamos las PASO en CABA, PBA y Tucumán y sí en Salta, Santiago del Estero y Capitán Bermúdez, donde doblamos la barra, anudaremos en todo el país pronunciamientos, acuerdos y movilizaciones que organicen la resistencia obrera al acuerdo con el FMI.
(*) De Politica Obrera
