por Omar Dalponte*
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Octava nota
Caminando unidos los triunfos electorales y los éxitos en la acción de gobierno estarán asegurados. Las divisiones, el desparramo, que cada quien prefiera recluirse en una parcela antes que compartir un territorio común para lograr la felicidad general, en la práctica política como en tantas otras actividades, conducen inevitablemente al fracaso. Hoy el peronismo, principalmente el peronismo lanusense, si quiere recuperar protagonismo tiene la obligación de hallar comunes denominadores, marchar en unidad para su crecimiento, producir un salto de calidad y optimizar su funcionamiento. Siempre debemos tener presente la importancia del Partido Justicialista. En el orden nacional, como institución de la Constitución Nacional, somos la expresión política más importantes de la Argentina. También una de las organizaciones políticas de mayor envergadura de América Latina. Hoy, a esta altura del siglo XXI muchas cosas han cambiado en el peronismo. Después de tantos momentos gloriosos y de muchas etapas difíciles tenemos la responsabilidad de gobernar en medio de una situación drámática, y para colmo, la necesidad de lidiar con una oposición rabiosa decidida a utilizar todos los medios a su alcance para derrocarnos. Esto nos exige firmeza, actuar con inteligencia, dejar de lado intereses personales o de grupo, unirnos, lograr una síntesis entre las viejas y nuevas generaciones de peronistas para, a partir del PJ, reconstituir el
Movimiento Nacional Peronista y recuperar la fortaleza que alguna vez tuvimos. Los mayores debemos esforzarnos por entender y comprender el sentir de la juventud y los jóvenes, por su parte, interpretar nuestro pensamiento y nuestras costumbres acumuladas durante muchos años. Dada la difícil situación que vivimos por culpa de la epidemia todo es mucho más complicado. Lo sabemos y lo padecemos. Pero la vida, aunque a los ponchazos, continúa y es nuestra obligación hacer todo lo posible, cada quien desde su lugar, para que la Argentina salga de esta desgracia de la mejor manera posible. En esto de que “cada quien debe hacer algo desde su lugar”, a nosotros los peronistas lanusenses nos corresponde aportar gestos de grandeza, voluntad política, inteligencia y dejar de lado todo aquello que conspire contra la unidad. Porque conozco bastante bien a muchísimos compañeros y compañeras se que la mayoría de ellos y ellas anhelan que el peronismo recupere el gobierno municipal en Lanús. No es necesario demasiado esfuerzo intelectual para darse cuenta que para concretar este anhelo es fundamental alcanzar el mayor grado de unidad posible y que hoy, por lo menos hasta ahora, contamos con un punto de encuentro desde el cual podemos iniciar la marcha hacia la victoria: El Frente de Todos.En poco tiempo, salvo alguna circunstancia imprevista, tendremos elecciones de medio término. De seguir como estamos – estúpidamente divididos - es imposible pretender tiempos de gloria. Todas las corrientes peronistas locales, sus agrupaciones, ateneos, grupos militantes, compañeros y compañeras que aún no decidieron sumarse a ningún encuadramiento, y principalmente el PJ como herramienta institucional, deben tomar conciencia de su rol histórico en nuestro distrito y producir un acto de gran significación política resolviendo la unidad de TODO el peronismo lanusense. Es lo que gran parte de la sociedad y la mayoría de los peronistas deseamos y exigimos a la totalidad de los referentes que tienen posibilidad de proponer e impulsar este gran paso hacia la concentración de nuestras fuerzas y fuerzas aliadas en un frente electoral con vocación de poder y capacidad para gobernar. Hay que respetar las limitaciones que decidió nuestro presidente Alberto Fernández para evitar mayor propagación de la epidemia. Pero con todos los cuidados, cumpliendo los protocolos, nuestros dirigentes y referentes peronistas deben hallar la manera de reunirse, debatir, lograr coincidencias y acordar los métodos para el armado de las listas que habrán de representarnos en las próximas elecciones. No es cuestión de dejar pasar el tiempo atornillados en las sillas, inmovilizados por el zoom mientras nuestros adversarios ganan las calles y ocupan espacios. Hay responsabilidades que asumir y nadie debe dejar de hacerlo. Principalmente quienes tienen, con todo derecho, aspiraciones de representar al peronismo lanusense en los lugares partidarios o como candidatos en los próximos comicios.
(*) De Iniciativa Socialista