por Sergio Giacona*
Si usted es lector de La Defensa Digital, sabe que desde abril de 2020, todo estaba decidido para que la ex Clínica Estrada pase a la órbita de nuestro municipio para la atención de los lanusenses. Sin embargo, en 48 horas el Juez Oyhanart se lo entregó al PAMI por 6 meses por presión de los gobiernos provincial y nacional. Desde la renuncia a cuidarnos de nuestro intendente cediendo a esta presión, cualquier cosa podría salir mal.
Así fue como después de llevarse parte de los insumos y equipos para el Hospital Evita, hubo que volver a equipar la clínica, hacer acondicionamientos internos ya que estaba cerrada hacía dos años, contratar al personal y demás. Finalmente, a mediados de julio pasado fue reinaugurada oficialmente para los abuelos que contrajeran covid 19 de manera leve.
En tres notas de este diario del 5,6 y 9 de septiembre, alertamos que a los empleados -a quienes les obligaban a facturarle a PAMI como monotributistas- no les abonaban desde que habían abierto en julio. ¡Es decir que por distintas excusas, los tenían hacía dos meses trabajando gratis!
Después del revuelo que se armó por las notas de La Defensa, empezaron a cobrar.
Pero hete aquí, que la clínica no recibe mas pacientes desde la primera semana de octubre.
A los empleados los obligaban a concurrir igual en su turno (algunos de 12 horas) para
Usted, ingenuamente se preguntará dos cosas: ¿Por qué la Clínica sigue en poder del PAMI si la cesión fue por 180 días? Y: ¿Quiénes y para qué siguen yendo, si no hay pacientes?
Bueno, paso a aclararle algo: la gente que realmente sabía de salud -a esta altura quedaban unos 10 profesionales- fue echada mediante mensajes de whatsapp, el 2 de enero pasado. Echaron a la gente que puede demostrar que su único empleador es el estado: Juicio en puerta y segura indemnización que vamos a pagar todos.
Entonces ahora sólo quedó gente de La Cámpora que trajeron el señor JC y la señora MB, que les cobran religiosamente a estos supuestos “trabajadores” $1.500 antes del día 5 de cada mes. Y pongo supuestos “trabajadores” porque ya no hay ninguna tarea que hacer allí. Además, también hay gente del Partido Obrero, que de obrero no tiene nada, pero que se prende en todas.
Se han alzado con los equipos de diagnóstico, las computadoras, las ampollas, medicamentos, sábanas, frazadas, cubrecamas, y todo lo que sea factible de robar. Han dejado las habitaciones vacías y seguramente no quedará nada de lo que resta. De esto La Cámpora y el Partido Obrero saben mucho.
Cuando al señor juez se le ocurra que la clínica pase a la órbita del municipio, quedará para nosotros los lanusenses, pagar para que se vuelva a equipar. Recuérdelo cuando le lleguen las tasas municipales con el 35% de aumento.
Vamos a presentar pedidos de informes al Concejo Deliberante y al ejecutivo municipal para saber qué se negoció en su momento por la entrega de la Clínica Estrada, y en qué benefició esto a los intereses de los lanusenses, únicos perjudicados, junto a los ex empleados originales y que tampoco cobraron las indemnizaciones por despido, desde que cerró la clínica y la zona se convirtió primero en un lugar de robos y usurpaciones de casas, luego en un centro de negociados y nuevamente de robo, pero ahora a cargo de la organización más grande del país y que nos gobierna.
Y recordálo siempre: el estado los cuida. A ellos. A vos, no. Vos pagá y quedate en casa.
(*) Precandidato a concejal por el Partido Libertario
