por Omar Dalponte
omardalponte@gmail.com
(Segunda nota)
Hoy, aquí, es necesario sacar fuerzas aún desde donde no las tengamos. Nadie puede hacer las cosas por nosotros. Pandemia mediante, con un rebrote que amenaza ser terrible y frente a la necesidad de sacar al país adelante, los que podemos y queremos ayudar nos vemos obligados a arrojar al costado de los caminos el chiquitaje de la politiquería. La cosa no va a ser fácil. Menos en Lanús que siempre ha sido un territorio complicado para la política. Desde que alcanzamos nuestra autonomía en 1944 hasta el presente ocurrieron cosas que si uno se detiene a mirarlas con atención no encuentra explicación como, a pesar de tanto disparate, aún estamos en pie. Repasemos algunos datos. En 39 oportunidades distintas personas se hicieron cargo de la intendencia. Algún mandato fue brevísimo. Luis Gomez duró apenas un día. Manuel Quindimil, en cambio, cubrió primero un período de tres años (1973-1976) y más tarde, fue elegido consecutivamente en seis oportunidades y estuvo en funciones durante 24 años ininterrumpidamente (1983-2007) No fue buena la brevedad. Tampoco fue bueno lo demasiado duradero. Reconozco y valoro, sin ninguna duda, el mérito de don Manolo por haber sido elegido siempre mediante el voto popular. Eso no lo logra cualquiera. En su momento lo enfrenté. Y me felicito por haberlo hecho. Lo adversé desde adentro y desde afuera. Perdí siempre frente a
Sigamos con el repaso. Desde el año 1945 hasta ahora, ¿saben los apreciados lectores cuantos intendentes terminaron sus mandatos? Apenas cuatro: Bernardo Gago (1948-1952) Manuel Quindimil en varias oportunidades (1983 – 1987 / 1987 – 1991 / 1991 -1995 / 1995 -1999 / 1999 – 2003) / 2003 – 2007) Díaz Pérez ( 2007-2011 / 2011 – 2015) y Néstor Grindetti (2015 – 2019) va cumpliendo hasta ahora su segundo turno después de haber triunfado en la última elección general. Que durante 75 años, o sea poco menos de veinte períodos de 4 años cada uno, sólo cuatro personas hayan cumplido la totalidad de sus mandatos demuestra que alguna irregularidad hubo. Creo. Ojo: sin olvidar que Quindimil completó seis mandatos uno detrás de otro.
Ahora regresemos para arrimar exactitud a un dato incompleto de mi nota anterior. Dije que en el año 1960 había llegado al Concejo Deliberante en representación del Partido Comunista la entrañable compañera y amiga Irma Othar. Así fue, pero el PC logró dos bancas y no una. El otro concejal comunista fue el obrero ferroviario Victorio Guastella. Gran tipo y un luchador valioso. Salvado el olvido y tratando de seguir más o menos cronológicamente los hechos de diferentes momentos del pasado, recordaré aquellos años llenos de sucesos importantes. 1959 comenzó con el triunfo de la Revolución Cubana y la llegada al poder de Fidel Castro, e l 1 de enero de aquel año. En la Argentina el presidente radical Arturo Frondizi ya había mostrado la hilacha de traidor al acuerdo con Perón y como enemigo del pueblo. El 14 de enero de aquel año privatizó el Frigorífico Municipal Lisandro de la Torre. Los obreros realizaron una huelga siendo reprimidos, el dia 17 a la madrugada, con 1500 efectivos policiales, de Gendarmería, del Ejército y con el apoyo de tanques de guerra que destruyeron las puertas del frigorífico. Aquella huelga, conducida por nuestro compañero peronista Sebastián Borro, héroe de la Resistencia, duró varios días, Borro fue encarcelado y dejaron cesantes a 5000 de los 9000 trabajadores. En los enfrentamientos con las fuerzas represoras jugaron un rol importante los vecinos del barrio de Mataderos, pero ese es un tema que merece un tratamiento en particular pues detallarlo requiere cierta extensión que no permite esta nota.
Fueron años de importantes acontecimientos que gravitarían seriamente en la vida de nuestro país: El conflicto en el terreno de la Educación denominado Laica o Libre, la incorporación al gobierno de Frondizi de Alvaro Alsogaray quien ya había sido influyente funcionario de la autodenominada “revolución libertadora” y algunos otros hechos que ya fueron publicados en mi nota anterior. ¿Qué ocurría por entonces en Lanús? Que hacía yo en aquellos días? Tanto dolor me hace reír diría Discepolín. Tanto disparate era para reírse si estos no hubiesen deteriorado tanto la vida institucional de nuestro distrito. Nos informamos por el libro Nueva Historia de Lanús del Dr. José Levitán. Veamos: después de que el radical Santiago Gogorza tuviera que irse, y luego de la gestión de Luis Gomez que duró un suspiro, el gobierno provincial intervino la Comuna y designó un intendente de facto: Mario Atencio que duró 10 días en el cargo. Lo sucedió Jaime Streger que fungió desde Junio hasta Agosto de 1960 (de facto) Luego se anuló la intervención, se repuso a Luis Gomez por dos días, éste renunció y el Concejo Deliberante designó intendente al segundo concejal Jacinto Defelipe, quien estuvo en el cargo desde agosto de 1960 hasta abril de 1962. Mientras tanto, como tipógrafo mi aspiración, igual que la de casi todos los jóvenes gráficos formados laboralmente en imprentas de barrio, era trabajar en Peuser o en Fabril. Pero el destino quiso que entrara a trabajar en la Secretaría de Comunicaciones, o sea en el viejo y querido Correo. Me asignaron un puesto de auxiliar en la oficina de Estafeteros y Vagones Postales por lo cual durante 25 años recorrí gran parte de nuestro país transitando casi todos los ramales de la entonces extensa red ferroviaria. Hermosa e inolvidable experiencia. Claro que la vocación militante política y sindical instalada en mi espíritu, siempre me marcó rumbos. En 1962 fui elegido delegado general de mi oficina cuya dotación era de aproximadamente 1.500 empleados. Pertenecíamos a FOECyT (Federación de Obreros y Empleados de Correos y Telecomunicaciones) organización nacida al calor de los “32 Gremios Democráticos”, denominación con la cual se identificaba el sindicalismo antiperonista. Por lo tanto nuestro sindicato, nacido en 1957, tenía una conducción descolorida pero sentada en el plato de la balanza inclinado para el lado del antiperonismo. Naturalmente eso significó que con los miembros de la comisión que me acompañaba, de entrada nomás ejerciéramos una firme oposición a la dirección ejercida por Angel Bucci y sus aliados. Orgánicamente nos encuadramos primero en la lista azul y blanca, más tarde alcanzamos un nivel de unidad importante con la lista azul y finalmente nos integramos a la lista blanca dando batalla, sin éxito, en las sucesivas elecciones y en las múltiples asambleas del gremio. Lo que si pudimos construir fue una oposición que impedía a la conducción del sindicato, hacer las cosas a su antojo. En la búsqueda de coincidencias fuimos labrando una sólida relación con la lista azúl, mayoritariamente comunista, y una fraternal convivencia con la célula del PC en Correo Central.
Desde mediados de 1950 hasta completar la década de 1960 fue un lapso de gran producción programática del movimiento obrero: 1957 Programa de La Falda, 1962 Programa de Huerta Grande, 1968 Programa del 1 de Mayo de la CGT de los Argentinos. En Lanús, desde 1962 hasta octubre de 1963, se suceden en la función de comisionados de facto, Aldo Poleschi (15/5/62 –14 /1/63) Osvaldo Braga ( 15/1/63 - 20/5/63) Rubén Santa Cruz (21/5/63 – 11/10/63) y luego se elige intendente municipal constitucional a Miguel Monserrat (12/10/63 – 29/6/66) que no terminó su mandato por el golpe de estado que derrocó el día anterior al presidente Arturo Humberto Illia. Por ese motivo asumió la presidencia de la Nación el general Juan Carlos Onganía, militar fascista claro exponente y sirviente de la alianza oligárquica, clerical militar que lo colocó en ese lugar.
En el orden local, por el resultado de las elecciones celebradas el 7 de julio de 1963, cuyos ganadores se hicieron cargo de sus funciones el 12 de octubre de ese año, entraron también al Concejo Deliberante en representación del Partido Socialista Argentino, el socialista y muy honorable vecino don Dioniso Losada y el peronista de la izquierda nacional Dr. José María Vazquez, prestigioso médico lanusense que después desempeñaría un rol militante muy valioso junto a Raymundo Ongaro y Rodolfo Walsh en la CGT de los Argentinos. De los concejales que asumieron en aquella oportunidad representando a la Unión Cívica Radical del Pueblo, recuerdo a un señor de apellido Lariguet muy capaz y profundamente democrático con quien tratar temas políticos resultaba sumamente agradable y enriquecedor. La dictadura de Onganía y compañía tuvo varios turnos. Desde el 29 de junio de 1966 hasta el 8 de junio de 1970 Onganía. Desde el 18 de junio de 1970 hasta el 22 de marzo de 1971, el genral Roberto Marcelo Levingston. Desde el 22 de marzo de 1971 hasta el 25 de Mayo de 1973, el general Alejandro Agustín Lanusse. En aquellos trágicos siete años de persecuciones, prohibiciones, torturas, encarcelamientos y asesinatos la dictadura no se la llevó de arriba. Pero el comentario sobre las grandes respuestas populares a la milicada asesina, a sus mandantes y lo que, al mismo tiempo ocurria en nuestro Lanús, queda para la próxima nota. Hasta entonces.
(*) De Iniciativa Socialista