Votaron a favor 23 concejales. “No estoy de acuerdo con el cambio de nombre a las calles”, dijo Lavandeira, y no lo votó.
En la sesión ordinaria se esperaba que el proyecto presentado por Gabriel Sandoval, que establecía el cambio de nombre de la avenida General Olazábal por el de Presidente Néstor Kirchner, fuese debatido antes de su aprobación. Sin embargo, un acuerdo previo entre oficialistas y oposición logró que, con dictamen favorable de las dos comisiones que lo trataron, se aprobase con los votos de los ediles presentes en el recinto, que eran veintitrés.
La única concejal que no lo votó fue Laura Lavandeira (foto) de Juntos por el Cambio, quien en el momento de la votación apagó su computadora y se retiró del zoom, volviendo a la sesión posteriormente.
Consultada por su decisión, la legisladora explicó: “No lo voté y no es cuestión de ideología. Si se le quería hacer un homenaje al ex presidente podría habérsele puesto su nombre a una esquina, una plaza, alguna institución… pero no a una calle. Yo estoy en contra de cambiarle los nombres a las calles y ya lo demostré cuando voté negativamente otros cambios similares, por ejemplo el de Arias por Cabrero, porque creo que no es bueno para los vecinos. Creo que hay que respetar a los próceres que hicieron nuestra historia y en este caso no hay que olvidar que Olazábal estuvo en varias batallas y con San Martín.”
“Estos cambios modifican el domicilio de una persona sin que se mude. Si es un comerciante, su habilitación comercial -que entrega el municipio una sola vez, al abrirse el negocio pero se renueva periódicamente- no sirve, porque en la renovación no aparece el mismo domicilio. O sea que el comercio no está habilitado”, e indicó que “a una sociedad la obliga a modificar el estatuto y un acosador pierde la perimetral”.
Señaló que “a los vecinos les trae muchas dificultades pues tienen que hacer trámites para cambiar domicilio en el documento, bancos, tarjetas, instituciones, servicios. Pueden perderse o dejar de ser entregadas cartas y notificaciones. Y hay trámites que deben hacerse personalmente. También obliga al gobierno de CABA a cambiar cartelería en el acceso al puente, pues tendrá que hacer otros con el nuevo nombre de la calle. Nadie pensó en todo esto”, reflexionó.
Respecto a los veinticinco expedientes que el Frente de Todos pidió que se trataran en sesión extraordinaria, de los cuales la mayoría refieren a cuestiones de género, indicó que en el HCD hay paridad de género en las autoridades y en varias comisiones hay más mujeres que varones, con lo cual no tiene sentido pedirla en un proyecto. “Respecto de las víctimas de violencia de género, uno debe cuidar a las víctimas día a día. Lo demás es pedir privilegios de género”.
“Pedir presidencias de comisiones para las mujeres, es humillante. Yo fui presidenta de comisiones y creo que se deben elegir por capacidad. De no ser así, no es meritorio”, dijo Lavandeira.
Lo cierto es que hay veinticinco proyectos, algunos que tomaron estado parlamentario recientemente, de los cuales no todos serían tratados en la sesión extraordinaria. Se hará una comisión de cuatro concejales, dos del oficialismo y dos de la oposición, para que examine y reduzca el número de los que serán objeto de tratamiento.
Previamente, en la Asamblea de mayores contribuyentes se aprobó por unanimidad la reprogramación de deudas contraídas con el Estado Provincial en el marco del Fondo Especial de Emergencia Sanitaria para la Contención Municipal.
Marta Santos