por Aurelio Nicolella*
¿Realmente querrán las distintas corrientes internas del radicalismo lanusense medir fuerzas entre ellos, o temen que en una elección los electores le den vuelta la cara? Porque pareciera que por los reenvíos de las elecciones partidarias, las idas y vueltas de postergaciones, pandemia de por medio, y encima que hace rato que los radicales de Lanús no votamos, olvidaron que la pata más importante del partido son los afiliados.
Por lo cual el diálogo no debe ser hecho entre las cúpulas o los “popes” sino debe ser hecho de cara y con la presencia de los afiliados al partido. Es una obligación de los dirigentes radicales hacia nosotros afiliados.
¿Porqué postergar una elección sosteniendo que con ello se cuida a los afiliados? Los afiliados sabemos cuidarnos y realmente cuidarnos es participar en la elección con los protocolos de sanidad existentes. Postergar elecciones es hacerle el juego a los que nos gobiernan que pretenden una especie de monarquía absolutista. ¿A eso pretenden llegar nuestros dirigentes, a sólo un “círculo chico y vicioso”?
Si hay una cosa que los radicales no tememos es el veredicto de las urnas, pero esta nueva dirigencia apoltronada en el partido y una timorata oposición que busca negociar sin el consenso de las bases, pareciera que lo único que pretende es llegar a un verticalismo,
Un consejo: No pongan palabras en todos nosotros afiliados que jamás dijimos ni diríamos. Queremos consenso, pero el que nace de una elección partidaria en donde las fuerzas que se midan arrimen proyectos que hagan del radicalismo esa gran alternativa popular por la que se creó con tanto esfuerzo.
Yo les diría a los candidatos que piden diálogo entre las cúpulas, que es la urna el único diálogo existente. Muchos afiliados queremos saber cuántos somos los que participamos en un acto eleccionario de internas, saber si los padrones están depurados o hay afiliaciones apócrifas. Siempre es bueno saber cuántos somos y quienes somos. Espero que nuestros dirigentes estén a la altura de las circunstancias.
Los radicales de Lanús queremos expresarnos como mejor sabemos hacerlo a través del voto. Basta de arreglos y conjuras palaciegas. Hoy un grito se repite como hace más de un siglo: ¡Queremos votar libremente!
(*) Abogado, militante radical de Lanús
