por Omar Dalponte*
Por fin una buena noticia para el lado de la justicia. El nombre de la estación Callao de la línea D de subterráneos llevará incorporado el nombre de Raquel Liberman. Raquel fue una de tantas mujeres atrapadas en las redes de la organización mafiosa judeo polaca llamada Zwig Migdal, cuyo centro de operaciones, allá por las décadas de 1920/30 se hallaba en la calle Córdoba al 800 de la ciudad de Buenos Aires. Dicha organización había hecho una importante cabeza de playa en la Avellaneda de los conservadores de Alberto Barceló, y sus ramificaciones delictivas se extendían por todo ese partido del cual Lanús, entonces, era parte.
Raquel Liberman, sobre cuya vida y sufrimientos, nosotros, desde los talleres en la Universidad de Lanús, en distintos artículos, en algunos de nuestros libros y mediante la accion de la Sociedad de Escritores Surbonaerenses que preside Laura Roda e integran compañeras y compañeros militantes de la cultura, hemos hecho referencia en decenas de oportunidades, fue una valerosa mujer que, desde los rincones oscuros de la prostitución, supo rebelarse contra los proxenetas y quienes los amparaban.
Con riesgo de su vida, después de padecer circunstancias muy duras, expuso ante un juez y un comisario honestos su situación. Tambien denunció respecto al padecimiento de muchas pupilas esclavizadas y obligadas a ejercer la prostitución. A raíz de esa denuncia la poderosa organización mafiosa fue desmantelada.
Años después Raquel moriría muy joven a los 35 años víctima de un cáncer.
Sin duda, esta valiente mujer que a riesgo de su vida luchó valerosamente contra la trata, lamentablemente no ha sido suficientemente reconocida y, lamentablemente, fue ignorada
por la historia oficial y por los movimientos feministas.
Hubo de ser una joven lesgisladora, Patricia Vischi, de la ciudad de Buenos Aires, del bloque Evolución Radical de la corriente que orienta Martín Lousteau, la autora del proyecto respectivo.
La decisión final será tomada próximamente en la audiencia pública virtual prevista para estos casos.
Esperamos que dicha iniciativa consiga su aprobación definitiva.
Como dijimos, personalmente y Desde la Sociedad de Escritores Surbonaerense (SES) hemos realizado desde hace mucho tiempo una prédica importante a favor de la figura de Raquel Liberman, especialmente a través de la tarea periodística y docente. La tarea de las compañeras y compañeros que integran nuestra entidad ha sido intensa y sostenida.
Lamentamos que núnca ningún integrante del Concejo Deliberante de Lanús se haya hecho eco de lo expresado a favor de Raquel y logrado alguna forma de reconocimiento público de ella en nuestra ciudad.
Pero siempre hay tiempo para poner ciertas cosas en su lugar. Esperamos que desde el deliberativo local el proyecto de la lesgisladora Vischi sea apoyado utilizando los recursos legislativos correspondientes.
Por nuestra parte insistiremos para que en la misma línea de subterráneos D se aclare que en una de sus estaciones figura el nombre de Roque Carranza, quien fuera funcionario radical en los gobiernos de Arturo H. Illia y Raúl Alfonsín.
Carranza, junto a dos complices, asesinaron e hirieron a varios peronistas mediante la colocacion de bombas en Plaza de Mayo, el 15 de abril de 1953 durante una concentracion de la CGT.
(*) De Iniciativa Socialista