Fue campeón mundial de básquet en 1950
El basquetbolista nacido en Valentín Alsina el 24 de abril de 1927, que se iniciara en el club Ñandú de esa localidad y que luego vistiera la camiseta de Racing Club de Avellaneda, dejó de existir a los 93 años de edad. Juan Carlos Uder jugaba en la posición de alero e integró la Selección Argentina que participó en los Juegos Olímpicos de Londres de 1948, hacia donde viajaron en barco, dos meses de ida y otros dos de vuelta. Dos años después integró la escuadra Argentina que logró conquistar el título en el Primer Campeonato Mundial organizado por la Federación Internacional de Baloncesto, disputado en el Luna Park de Buenos Aires entre el 22 de octubre y el 3 de noviembre de 1950.Además del local, participaron de la competencia los representativos de Estados Unidos, Francia y Brasil, los tres mejor posicionados en Londres 1948; Egipto, campeón europeo en 1949; Italia -que no concurrió y fue reemplazada por Yugoeslavia- y España, clasificados en el Torneo Europeo de Niza 1950; Uruguay -que en solidaridad con los reporteros de su país se retiró, ingresando en su lugar Ecuador- Chile y Perú, los tres mejores del Sudamericano de 1950 detrás de Brasil. Después de superar a Francia (56-40) en la primera fase, el local clasificó directamente a la ronda final, donde venció a uno de los candidatos, Brasil (40-35); luego a Chile (62-41), otra vez a Francia (66-41) y luego vapuleó a Egipto (68-33) para dar la gran sorpresa en la final ante el equipo norteamericano, al que venció por 64 a 50 en un Luna Park colmado por 25.000 espectadores. La fiesta se extendió a las calles de Buenos
Aires. La figura de Argentina fue Hugo del Vecchio, con grandes actuaciones del capitán Oscar Furlong y Roberto González. Juan Carlos Uder también formó parte del equipo que obtuvo la cuarta colocación en los Juegos Olímpicos de Helsinki 1952. Esta vez, viajaron en avión.
El 10 de mayo de 2019 Juan Carlos Uder fue distinguido como Ciudadano Ilustre por el Concejo Deliberante de Lanús (foto). Según expresó al recibir el reconocimiento, recordando aquella gran conquista: “El presidente Juan Domingo Perón, que apoyó incondicionalmente al torneo, nos obsequió un automóvil Chevrolet '51 a cada integrante del equipo como premio por la victoria. Pero en 1956 la revolución libertadora ordenó una investigación y a raíz de la entrega del auto, la confederación pasó a considerarnos profesionales. Y como el básquet en la Argentina era amateur, nos suspendieron a todos de por vida. Ninguno de nosotros pudo continuar con su carrera”.
Marcelo Calvente