Tomemos por ejemplo lo que pasa en Villa Jardín: «Acá parece que la gente vive de joda. Se escucha la música fuerte día y noche. Hay asados y locro por todas partes. Pibes compartiendo la botella de cerveza en cualquier esquina. Funcionan tres grandes ollas populares (foto) que juntan doscientas o trescientas personas: La “Tumba & birra” en Osorio y Moreno; la “San Jorge” en Mazza y Obón; y “La Resaca”, en Mazza y Otamendi. Además de otras ollas más pequeñas, entre estas una que arman unos “transas” de la droga», dice un vecino que pide estricta reserva de su identidad.
Por su parte, una vecina de la villa La Fe de Monte Chingolo jura que allí pasa más o menos lo mismo.