por Lisandro Martínez*
“Los índices cayeron 7 días seguidos y el 27/2 sufrieron pérdidas históricas cerrando la peor semana desde el pico de la crisis financiera global, una irrefutable señal que los inversores temen un daño a la economía por el coronavirus” (La Nación 29/2/2020).En EEUU el S&P 500 bajó 11,5%, el Dow Jones 12,4% y el Nasdaq 10,5%. Tokio cayó el 3,67%, las principales bolsas europeas retrocedieron más del 3%. En el mercado español fue castigado el turismo. “Las aerolíneas (IAG, British Airways, Iberia y Vueling, etc.) perdieron un 9%. La hotelera Meliá 4,7%, Amadeus de la industria de viajes 4%.
China es hoy el coloso industrial (el gran taller del mundo capitalista) que disputa el primer lugar y genera la quinta parte de la economía mundial. En diciembre de 2019 el coronavirus se instaló en el continente asiático y hace más de un mes China está paralizada (www.ambito.com 2/2/2020).
Junto a las medidas de cuarentena se agravan los problemas en las cadenas productivas y de suministro cuyo funcionamiento se altera por falta de obreros. China es el mayor consumidor de commodities del mundo (soja, cobre, carnes, etc.) y el asentamiento -por su mano de obra barata- elegido por monopolios que allí concentran su producción. Hasta ahora son 56 países y territorios afectados por el Covid-19, hay 83.671 casos y 2865 muertos (www.elpais.com.es 27/2/2020).
Entre 2002/2003, China padeció el virus SARS y la economía global perdió u$s 40.000.000.000 (www.infobae.com 1/2/2020), después Beijing recortó impuestos y créditos de estímulo. Ahora hay grandes déficit en muchas de sus provincias.
El temor al contagio y las restricciones que impuso Beijing para que el Covid-19 no se propague por el mundo, hicieron que millones de chinos se quedaran en sus casas. A esto
hay que sumarle la cuarentena gubernamental que cerró Wuhan, una ciudad de más de 11 millones de habitantes. Es la ciudad más grande del centro de China y uno de los nudos importante de transporte. También impusieron bloqueos en otras ciudades, Huanggang y Ezhou. La OMS y varios países también emitieron comunicados aconsejando no viajar a China.
Con la cancelación de vuelos y el cierre de rutas las aerolíneas entraron en pánico colocadas frente a un impacto económico enorme. IATA prevé que alcanzará los u$s 30.000.000.000 (27.500 millones de euros). Lufthansa, una potencia aérea europea, anunció la congelación de contratos, la interrupción de rutas asiáticas y ofreció al personal permisos sin salarios.
El Covid-19 reducirá los ingresos del turismo mundial en u$s 22.000.000.000, esta cifra sólo corresponde a turistas chinos "que están dejando de viajar en estas semanas", afirmó la presidenta del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (www.elmundo.es).
El régimen chino capitalista creó el sistema bancario más grande del mundo, con más de u$s 41 billones en activos. Como resultado, el volumen de deuda privada y pública se disparó en la primera década del siglo XXI, sobrepasando el 300% del PBI. China padece hace rato una economía “ilegal” por lo que en 2017 prometió eliminar los riesgos sistemáticos de su ecléctico sector financiero, repleto de bancos clandestinos que otorgaban créditos offshore. La llamada desregulación china había accedido a todo tipo de estropicios que permitieron que 50.000.000 inversores generaran una deuda de más de u$s150.000.000.000. Una deuda muy alta que contrasta con los ingresos. Esto implica que los funcionarios chinos no podrán reducir las tasas hipotecarias y las de créditos de consumo para compensar el impacto comercial con EEUU (agencia Bloomberg). S&P Global- Market Inteligencia de EEUU, advirtió que el Covid-19 podría triplicar el volumen ya muy elevado de deudas incobrables en China. El abultado endeudamiento, los créditos clandestinos, la burbuja hipotecaria, ahora sumadas el Covid-19 resultan un coctel explosivo para todo el régimen capitalista mundial.
“La realidad ha revelado que el Covid-19 es una pandemia mundial en lugar de una epidemia concentrada en China. Por ahora es un misterio conocer si otros países de Asia y de otros continentes experimentarán un brote. Incluso en EE. UU, donde el contagio es tan limitado, los eventos se cancelan y el público prefiere quedarse en casa en lugar de salir. Esto aumentado es lo que sucedería si el contagio realmente afecta a EEUU” (Financial Times (26/2/2020).
Por ahora China es la nación más gravemente afectada y las cadenas de suministro mundiales se ven seriamente comprometidas. China representa el 20% del PBI mundial. En el 2003 durante el episodio virosico SARS era el 4% del PBI mundial. El daño económico se encaminó a Japón, Corea del Sur e Italia. Si la enfermedad se disemina a otros mercados desarrollados y emergentes, el daño aumentará en proporciones” (Rosa & Roubini Associates 26/2/2020).
A medida que ha aumentado el número de casos de coronavirus notificados fuera de China, la narrativa predominante del mercado ha cambiado: el coronavirus ya no es un problema predominantemente chino, sino que es un problema mundial (www.rankiapro.com 27/2/2020).
El contagio en la Argentina no llegó por el virus sino a través del valor más alto del Riesgo País con 2184 puntos en el gobierno de los Fernández. El 27/2 la caída general de bonos se complementó con una baja en el índice Merval del 2,84%. Los ADR de empresas argentinas que cotizan en Wall Street se derrumbaron hasta 5,07% (www.infobae.com 24/2/2020).
El lunes 2/3/2020 en Argentina, el peso se depreció un 0,08%, a $ 62,25/62,26 unidades, frente a un valor histórico de $65. El índice bursátil S&P Merval subió un 3,66%, un rebote técnico tras acumular la semana anterior una pérdida del 9,4%.
No obstante Mohamed El Erian, economista en jefe del Grupo Allianz del canal CNBC, señala: “El coronavirus es diferente. Va a paralizar a China y va a caer como una cascada sobre la economía global (...) es importante destacar que no puede ser contrarrestado por la política de los bancos centrales”.
En China, el consumo y la producción han bajado drásticamente. En EEUU, la encuesta de actividad económica en servicios, incluidos transporte y turismo, se desplomó por abajo del nivel 50 y está en zona de contracción. En Zona Euro, la desaceleración no es clara por el momento, pero parece difícil de evitar (www.libremercado.com).
No al pago de la deuda
Fuera el FMI
Gobierno de trabajadores
Salud y educación bajo control obrero
Unidad socialista Latinoamericana
(*) Del Partido Obrero-Tendencia