El Defensor del Pueblo Alejandro Gorrini, frente a innumerables llamados telefónicos de reclamo por parte de los jubilados que hacían fila en la vereda del Banco Supervielle de Hipólito Yrigoyen y Mármol para cobrar, estuvo charlando con ellos (foto) para escuchar sus pedidos. Sucede que el banco cierra a las 14:00 y sobre esa hora les permitían entrar de a poco, con lo cual temían no poder cobrar su jubilación. Pero Gorrini logró mantener una reunión con la autoridad de la sucursal, quien le aseguró que entregarían un número a cada uno de los que aguardaban y, aunque el banco tuviera que cerrar sus puertas, se mantendría la atención hasta pagarles a todos y, ante su insistencia, que cumpliría con todos los protocolos impuestos.El Defensor aseguró que visitará instituciones bancarias, sobre todo a las que congregan la mayor cantidad de jubilados, a fin de hacer gestiones para que le garanticen la atención de este sector, de ser necesario, mas allá de los horarios habituales.
Marta Santos