Al que se le ocurrió la idea es un genio: Como los vecinos se quejaban de que nadie controla a los que tiran su mugre en la calle, mandaron a custodiar -en lugar de vigilarlo encubiertamente- el basural a cielo abierto con dos agentes permanentes, con el resultado de que ahora los mugrientos tiran la basura en otra cualquier esquina, y hay menos vigilancia donde tendría que haber.
Esto sucede en la esquina de Posadas y Alfonsín, en Villa Obrera. En esa misma localidad, quitaron el rondín que la policía local había implementado en el centro comercial de Centenario Uruguayo y Eva Perón. Un genio el jefe de policía Gustavo Demattey.