Los vecinos no lo ponen en duda: -A don Oscar lo mató la falta de luz. Estaba enfermo y necesitaba nebulizaciones y estar calentito, y acá hace hace más de una semana que estamos sin luz, todos muertos de frío- dicen en la villa Jardín.
Don Oscar vivía a metros de Otamendi y Mazza, lugar donde exoplotó el transformador la semana pasada. En todos estos días las cuadrillas hicieron algunos “emparches”, la luz volvió por un rato y se fue como había venido. Anteayer cambiaron el transformador, hubo electricidad por una hora y volvió el apsgón. Un verdadero suplicio.
-Como se ve en la foto, las cuchillas del transformador están abiertas- explica un “entendido”.