Ayer por la noche, en pleno corazón de la prueba piloto “antientraderas”, en Valentín Alsina, una familia fue asaltada por un verdadero escuadrón de sujetos: seis tipos, todos vestidos prácticamente iguales, bajaron de un auto que previamente le habían cruzado al vehículo de sus víictimas, sacaron a la rastra al hombre, a la mujer -embarazada- y a sus dos hijos. Lo extraño de esto es que los chorros dejan entrar a la mujer y sus hijos a la casa, cierran las puertas, y se llevan el auto. Sucedió en Chaco y Benito Perez Galdós, y fue noticia en los medios nacionales por la impunidad y la espectacularidad con que se manejaron los chorros.