La canchita de Los Patos 3745, cuyas molestias al vecindario llegaron al Concejo Deliberante -organismo que pidió su inspección- está habilitada desde 2014 con el número 286547, a nombre de Nelson Paiva para que funcionen dos canchas de papifútbol, parrilla y venta de bebidas.
Claro que no está habilitada para funcionar hasta la madrugada, con la consiguiente gritería, ni para que se emborrachen sus parroquianos que protagonizan batallas campales en la otrora tranquila barriada.
Y una fuente inobjetable le confía a La Defensa que últimamente, para por allí algún narco-futbolero,que atiende a los “deportistas”.