por Lisandro Martínez*
La crisis internacional en Lanús y Argentina 
El cierre de sucursales de Carrefour que funcionan en locales en alquiler –como el de Lanús, en Hipólito Yrigoyen 4435- es parte de un plan para que los trabajadores y el pueblo paguen los platos que rompieron los capitalistas. El monopolio internacional de la distribución ha anunciado una reestructuración a escala mundial que afectará a miles de trabajadores.
Durante 2015 Carrefour de Francia perdió en la bolsa un 40%. En 2017 resignó el liderazgo en Francia a manos de la cadena E. Lecrec y ese mismo año Amazon compró la cadena de supermercados Whole Foods profundizando las ventas por internet. Por esa novedad “dicen” que un millón de clientes dejaron de comprar en Carrefour. Con este cuento del tío, Carrefour presentó un Plan de transformación y racionalización en los países donde está presente. En Francia destruye 2.400 puestos de trabajo sobre 10.500 y estudia vender 273 puntos de ventas que antes compró al grupo Día lo que le produjo pérdidas de150 millones de euros (www.efe.23/1/18) y espera, en medio de la violenta crisis capitalista internacional que desborda el planeta, encontrar la salvación online.
Pero la verdad de la milanesa, es que el grupo no tiene intención de cerrar sus hipermercados que representan la mitad del volumen de ventas.
De la lluvia de inversiones a los despidos en masa
El “plan de transformación” tiene como objetivo bajar los costos y abaratar la mano de obra. Ese es el plan y para ello es necesaria la complicidad política de los gobiernos de Francia, Bélgica, Argentina, etc. En el caso argentino, el socorro millonario del tesoro nacional al
monopolio extranjero. Para clarificar aún más el fraude en Bélgica, el gobierno pagó dividendos a los accionistas del monopolio y hoy Carrefour va a hacer pagar a los laburantes belgas y a la Seguridad Social una reorganización donde los obreros ni el tesoro belga tienen responsabilidad (www.rtbf.be/info/belgique/detail_marie-helene-ska-csc-les-syndicats-ne-sont-pas-la-juste-pour-tenir-le-couvercle-sur-une-marmite-prete-a-exploser-socialement?id=9823244).
Carrefour espera ahorrar 2.000 millones de euros hasta el año 2020 para invertir en el comercio online con cero costo fijo, salarios bajos y márgenes elevados.
En Argentina, según la consultora Clave, la empresa tiene 500 sucursales y 20.000 empleados. De ese total de locales más de 300 pertenecían a la ex cadena Eki que el monopolio francés compró en 2014. Durante 36 años Carrefour monopolizó la distribución de alimentos en Argentina y se llevó ganancias siderales, mientras sus trabajadores eran súper explotados, tercerizados, con horarios a contrapelo y salarios bajos.
A comienzos de abril 2018 Carrefour presentó el Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) ante el MTSS y anunció su plan aprovechándose del plan de guerra de clases contra los laburantes pergeñado por Macri con la oposición en los consejos deliberantes, las legislaturas y en los parlamentos. El gobierno subsidiará al monopolio internacional haciéndose cargo: 1) del 50% de los aportes de los 19.000 empleados de la empresa por 18 meses. 2) la patronal despide a 1.000 trabajadores comenzando por los de mayor antigüedad y con carga de familia, a quienes pagaría “por retiro voluntario” hasta el 150% de lo que corresponde por ley (www.Iprofesional.com 17/4/2018). El Plan incluye jubilaciones anticipadas. 3) Carrefour se compromete a no efectuar nuevos despidos durante los 18 meses. 4) Carrefour continúa con el PPP hasta 2021 con Paz Social, pero pudiendo despedir pagando el 50% a partir de 2019 (Página 12 - 24/4/18).
Desde abril de 2015 al mismo mes de 2017 los grandes supermercados ya habían despedido a 5.400 trabajadores del sector (www.gremialesdelsur.com.ar 30/8/17). Por lo que el plan de reconversión y ajuste sirve también para reforzar la reforma laboral y la patronal negrera no tiene que esperar sanción de ley alguna.
“Diego Virgil, dirigente de la asociación de Empleados de Comercio de Rosario, desmintió los argumentos de crisis presentados por Carrefour, ya que el procedimiento de los franceses durante tres décadas fue girar, girar y girar el 100% de las ganancias a su país de origen” (agencia.farco.org.ar 10/4/18).
La nota grosera la dio Macri ante el reportero del ABC de España cuando denunció que “la culpa de la situación la tienen los supermercados chinos que evaden el pago de impuestos y son una competencia desleal”. Macri que ya arregló con Carrefour a quien subsidiará durante un año y medio, se animó para decir en la misma nota “el que no paga impuestos no sostiene la educación pública, la sanidad ni la seguridad”. Esperemos que al finalizar su gobierno los trabajadores podamos interrogarlo como corresponde sobre este demasiado largo proceso de prevaricato por él protagonizado.
La indefensión de los trabajadores sindicalizados y de no afiliados al Sindicato de empleados de Comercio surge del modelo de sindicatos estatizados que funciona en Argentina desde finales de la década del 30 y que están organizados para defender intereses patronales. No obstante “el sábado en hipermercados porteños de Carrefour, los trabajadores pararon rechazando el acuerdo de Armando Cavallieri con la patronal y el Gobierno, que incluye generalizar despidos y reducir los salarios (www.infogremiales.com.ar 21/4/18).
No vamos a abundar sobre quién es Cavallieri, autor del acuerdo con Carrefour y firmante de las violaciones a los derechos de los laburantes (destrucción de la obra social y paritarias en cuotas y muy lejos de la canasta familiar que sostenga a la prole trabajadora). Cavallieri tiene un opositor salido del mismo nido que él: Ramón Muerza al que le dicen “el hijo de Alfredo Coto” (www.gestionsindical.com.ar 9/5/17).
¿Quiénes son los evasores y terroristas?
Muerza es un muñeco de la dupla Mauricio Macri-Alfredo Coto. Alfredo es un evasor impositivo que aprovechó el último blanqueo para legalizar $7.000 millones. Producto de un allanamiento el 30/8/16 se conoció que esta troika antiobrera se estaba preparando para alguna provocación armada ya que encontraron en un local de Coto un arsenal de armas: 227 granadas, 41 proyectiles de gases lacrimógenos, 27 armas de fuego, 2 de lanzamiento, 3.886 municiones, 14 chalecos antibala, 22 cascos sin numeración, 9 escudos anti tumultos, gas pimienta, 1 silenciador de armas, 1 revolver inscripto como de A. Coto con número de serie adulterado, 8 escopetas con pedido de captura desde el 2003, 1 ametralladora con silenciador registrada a nombre de Alfredo Coto (www.eldestaper.com.ar. 6/5/17).
Muerza está sospechado de haber suministrado el arsenal y proveerle matones a “don Alfredo” para amedrentar a los activistas (www.gestionsindical.com.ar 9/5/17). La denuncia Penal está en el Juzgado Federal N°2 del Juez Sergio Ramos y la Fiscalía Federal 10 a cargo de Paloma Ochoa.
Para entender la genética de la patronal y de sus dirigentes sindicales bastan dos hechos: 1) un local de Carrefour fue denunciado por vender pañales que debían recibir gratuitamente los afiliados del Sindicato. 2) Carrefour donó un pañal por cada uno vendió a la fundación Conin -una ONG contraria a los derechos de las mujeres-; los miles de pesos donados a la ONG fueron producto de pañales vendidos en las góndolas de Carrefour, entre ellos los que debían ser entregados gratuitamente a los afiliados de SEC.
No a los despidos.
Nacionalizar los monopolios bajo dirección de los trabajadores.
Vigencia de las leyes laborales.
Que comisiones obreras en Carrefour y en cada empresa que pretenda ingresar al Procedimiento Preventivo de Crisis, abran los libros.
Nacionalización de la distribución de los alimentos bajo control obrero.
(*) Del Partido Obrero
