Como adelantó este medio el último día del año pasado, un centenar de abogados de Lanús y Avellaneda que no se habían pasado al Colegio de Abogados que le correspondía por sus domicilios, iniciaron el trámite y quedaron atrapados en el gueto que la presidenta Adriana Coliqueo (foto) y el secretario Ariel Vacaro -julianistas- construyeron para no ver peligrar su espacio.Ahora, a más de un mes sin respuesta, con la firma de Gabriel De Pascale se ha iniciado una denuncia contra los consejeros del Colegio de Abogados de Avellaneda-Lanús (CAAL) que tratarán los pases el día 9 en sesión ordinaria.
Las fuentes consultadas aseguran que el Inadi tiene previsto citar individualmente a cada miembro de la conducción del CAAL para que expliquen lo que consideran una “grave discriminación gremial y política”. En la denuncia figuran, entre otros, el caso del secretario Vaccaro que no reside ni en Lanús ni en Avellaneda y tiene su estudio en Adrogué.
“Todas las miradas quedan puestas en la reunión del próximo viernes. Adelantan que algunos consejeros no quieren quedar involucrados en esa denuncia y argumentarían que la incorporación de los nuevos colegas le significaría al CAAL un ingreso anual de más de medio millón de pesos”, acotan las fuentes.
Las finanzas son un grave problema en el colegio local, desde que en su fundación los "pases" que atrajo Julian Alvarez de muchos funcionarios de la capital federal y de zona norte, hoy están de baja y dejaron de aportar. Mientras retumban todavía los cortocircuitos de fin de año por la localización del edificio propio entre los representantes de Avellaneda y los de Lanús.
