jueves, 28 de diciembre de 2017
La sala quedó hermosa pero el personal...
Cecilia de Villa Caraza fue ayer atenderse un dolor de oído en la refaccionada sala Miranda Norgreen y cuenta: “Me cansé de esperar al clínico de guardia y me tuve que retirar, luego de recibir la respuesta de la recepcionista que me dijo que ella había ido a su obra social y había esperado 4 horas así que yo bien podía esperar el mismo tiempo por ser una salita de barrio, gratuita. Es que está hermosa la sala. Quedó muy pero muy linda, pero las personas responsables siguen siendo las mismas porquerías que antes, nada más que ahora con camisa y corbata.”