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jueves, 9 de noviembre de 2017

El ministro de Agroindustria es un negrero

por Lisandro Martínez*

Macri, un hombre empecinado en imitar a la última dictadura militar adoptando un plan económico similar, ha designado para el cargo de ministro de Agroindustria al actual presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevehere, tal como Videla hiciera con el extinto Jorge Zorreguieta. Etchevehere tiene un sinfín de acusaciones penales, entre ellas la de reducir a la esclavitud a trabajadores rurales que prestaban servicio en sus campos de Entre Ríos.
Los cargos son: 
1. Falsificación de firmas,
2."Negociaciones incompatibles y administración fraudulenta",
3. Defraudación y estafa por "administración fraudulenta",
4. Evasión fiscal fraudulenta,
5. Comportamiento prohibido por violación de "alguna de las disposiciones contenidas en el Régimen Penal Cambiario",
6. Reducción a la esclavitud de su personal,
7. Vaciamiento de empresas,
8. Simular la obtención de préstamos, defraudación directa al Fisco,
9. Transferencias de dinero prohibidas entre sus propias empresas,
10. Violación a la ley cambiaria,
11. Exclusión y daño a una coheredera,
12. Evasión tributaria,
13. Cuentas en el exterior no declaradas,
14. Falta de transparencia empresaria e institucional,
15. Apropiación indebida de campos.

    En mayo de 2014, el titular del Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores Agrarios
(Renatea), Guillermo Martini, señaló que “había peones de más de 50 años que no sabían leer ni escribir, eran trabajadores no registrados, vivían en unidades sin energía eléctrica, agua potable, ni baños”. La fiscalización se llevó a cabo en siete establecimientos propiedad de Etchevehere que se dedican a la actividad ganadera y agrícola. Puntualmente, en el establecimiento ‘La Hoyita’, de la empresa Las Margaritas S.A. En esas condiciones inhumanas vivían dos personas. “Son analfabetos, no tienen acceso a recibos de sueldo y prestaban servicios como peones generales por 450 pesos mensuales”, denunció ese organismo público.
   La TV Pública señaló entonces que “dos peones del titular de Sociedad Rural Argentina denunciaron explotación laboral, eran hermanos que se desempeñaron 38 años en la estancia de la familia Etchevehere. La justicia investigaba el posible delito de reducción a la servidumbre. El directorio de la Sociedad Rural Argentina cuestionó a Etchevehere por la denuncia que lo vinculaba con el trabajo esclavo” (www.tvpublica.com.ar 26/6/14).
   Las víctimas del fraude laboral eran Sergio y Antonio Cornejo, quienes en 1976 ingresaron junto a su padre en “La Hoyita”, el campo de la familia Etchevehere. Para desmentir los hechos 40 años después, Etchevehere señaló “los hermanos Cornejo vivían sobre el borde del río como montaraces y yo no tenía nada que ver con ellos, y La Hoyita no tenía nada que ver ni conmigo ni con Las Margaritas SA”. Ambas afirmaciones resultaron falsas y refrendadas por la justicia.
   El Grupo Económico Etchevehere, liderado por el presidente de la Sociedad Rural Argentina, no sólo logró el encubrimiento de la corporación mediática, además tuvo bajo su dominio a Gerónimo “Momo” Venegas, de la UATRE, quien actuó asociado a la Sociedad Rural Argentina hasta su muerte.
   La designación de Etchevehere se da en un marco donde la grilla salarial para la UATRE recién aprobada es una escala que va desde los $12.600 a los $14.800, sin horarios ni descansos establecidos.     Etchevehere es un ejemplo del personal político dispuesto a no respetar ni las leyes del capital y que se hace cargo de la cosa pública con una metodología de impunidad adquirida que va a utilizar en el ejercicio de su función para intentar esclavizar en primera medida a los trabajadores del agro.
   La catadura de este gobierno que lanzó un paquete de medidas coercitivas contra los trabajadores deberá ser el disparador de una acción colectiva y consecuente para derrotar el plan del gobierno de Macri.
    (*) Del Partido Obrero