Mariela Pighin vive aterrada pensando que su ex novio pueda volver a su casa, a terminar la “tarea” que interrumpió la policía que arribó justo cuando el tipo le había clavado una tijera en la cabeza a la mujer a la que estaba literalmente moliendo a golpes.
Sucedió en Alsina hace un par de días cuando a Marcelo Morinigo (foto) su novia de 42 años le dio salida: —O la droga o yo- le había dicho ella. Y el hombre, que no se resignaba a perder a ninguna de las dos, fue a la casa de Pighin con la excusa de recoger sus petates. Allí quiso convencer a la muchacha de continuar el romance que llevaba cinco meses y como ella se negó, tomó una tijera, se la clavó en la cabeza y la molió a golpes.
La salvaron los vecinos que al escuchar la pelea llamaron a la ley y el valiente, cuando oyó las sirenas de los patrulleros de la Comisaría 3ª, salió carpiendo.
La víctima permaneció internada, ya está físicamente restablecida, pero su vida es un infierno: Morinigo sigue fugitivo.