En avenida Donato Alvarez a la altura de Pichincha, hace más de dos meses que está instalado este montón de basuras y ramas. Allí funciona la feria de los domingos y los puesteros pagan para que junten la mugre al terminar la feria, pero la basura sigue estando. Y tanto feriantes como sus clientes, conviven con las porquerías y con un olor nauseabundo.