por Lisandro Martínez*
Para que pase el ajuste sin fin, haya más desocupación y se caigan todas las leyes laborales, la patronal necesita imponer en Argentina la represión con las FFAA.El intento del 2x1 del Papa, Macri, CFK/PJ, para que las FFAA se hagan cargo de la represión fracasó en este primer round. Más de un millón en las calles del país impusieron, otra vez, la voluntad de la mayoría. Por aplastamiento masivo en cada provincia se rechazó el pacto de impunidad para los genocidas.
Una vez más: “Vox populi vox dei”.
La idea del Papa, la ex presidente y el actual gobierno es preservar a los 3 jueces carapintadas para que impongan finalmente el punto final.
El PCR/CCC y Libres del sur están vinculados con la CTEP y han visitado al Papa de Guardia de Hierro, consustanciados ideológica y prácticamente con él. La esencia política retrógrada y antiobrera del Vaticano ya la señaló Carlos Marx en 1848 en la introducción del Manifiesto Comunista, cuya traducción para la izquierda es: “con el Papa la clase obrera no debe ir ni a misa”.
El FpV que reclama hoy “contra el 2x1” tuvo como ministro de Justicia durante la presidencia de Néstor Kirchner al juez Carlos Rosenkrantz. Este sujeto integra hoy la Corte Suprema macrista y es uno de “los 3 carapintadas” que falló dando luz verde a la ley del 2x1 en favor de
los genocidas. Otro supremo, Horacio Rosatti, siendo intendente en Santa Fe cobijó durante 7 años a un conocido represor, secuestrador y violador, para que cumpliera “misiones especiales”. Esta Corte de mafiosos armada en la Cámara de diputados y en senadores por voto unánime es la que ya desautorizó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para que no pueda revisar los casos argentinos.
Las primeras 100 leyes del ajuste macrista (pago a buitres, devaluación y tarifazos), pasaron por los votos del FPV, FR/GEN y los del PJ. Macri tuvo así “la gobernabilidad”, cuyo resultado fue un agravamiento en las condiciones de vida del pueblo trabajador a quien le suministraron mayor desocupación y aumento de la pobreza.
La tarea ardua encabezada por NK y CFK -en cuanto a retrotraer la historia-, avanzó pudriendo Madres de Plaza de Mayo, luego vino el Proyecto X y coronó con la Jefatura del Ejército al genocida Milani.
Es revelador conocer en detalle la historia de cómo CFK, Bergoglio y Macri intentaron el nuevo Punto Final. Primero el FPV y el PJ/FR/GEN votaron en diputados y senadores por Rosenkrantz y Rosetti, dos conocidos comevelas y carapintadas. “A fines de marzo de este año, luego de las audiencias en la CIDH -en Washington-, la delegación oficial encabezada por el Secretario de DDHH, el macrista Claudio Avruj, interesó al presidente de la CIDH, Francisco Eguiguren, sobre la situación de los militares detenidos por crímenes de lesa humanidad, en una gestión impulsada una vez más por la Iglesia Católica Apostólica Romana. El gestor de la presentación a favor de los represores que impulsó Bergoglio, es Siro Luis de Martini, asesor jurídico del ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano -otro macrista-; de Martini es hijo de un marino comando civil en 1955 y familiar de un juez de la dictadura. (www.agendaabierta.com.ar 26/03/2017).
Avruj pidió a la CIDH que dilatara el tratamiento de la medida cautelar ya que conocía en detalle los entretelones judiciales, explicó que la Corte Suprema de Justicia fallaría el caso antes de la visita de la CIDH. Avruj pidió que la CIDH recibiera a las organizaciones de familiares de militares genocidas, detenidos por crímenes de lesa humanidad y también a una delegación eclesiástica que encabezaría el delegado papal, nuncio apostólico Emil Paul Tscherrig.
Desde hace muchas décadas la burguesía nacional sometida al pensamiento mágico de los fabuladores religiosos impuso la Triple A, la dictadura genocida y la democracia del hambre y ha demostrado que lo poco que tenía para ofrecer al pueblo es nada o como dijo otro sápatra “sangre, sudor y lágrimas” por varias generaciones.
La burguesía ante cada crisis política fracasó con su gobierno por falta de independencia política y económica frente a las metrópolis. Sus fuerzas armadas estuvieron sometidas a la CIA, a los paracaidistas franceses torturadores en Argelia, etc. La religión (que siempre debe ser una cuestión íntima) abrumó a los argentinos no sólo metiéndosenos en la cama y en el útero de nuestras mujeres, sino que esa subordinación fue para consolidar sus negocios de la educación privada y los subsidios estatales, por eso bendijo cada uno de los fraudes políticos y económicos contra el pueblo y finalmente aceptó las desapariciones bajo el cínico rótulo de “en algo raro andaban”. Bergoglio con el apoyo de Raúl Alfonsín y el entonces senador Duhalde le propusieron a De la Rúa una mesa de diálogo entre “los dos demonios”; esa iniciativa se devoró el gramo de autoridad que le quedaba a Chupete. Los obispos querían “recuperar los valores morales” antes de la reapertura de todos los juicios. Duhalde indultó a Seineldín y a Gorriarán Merlo y no dictó un indulto general sólo porque NK a punto de asumir entendió que el pueblo triunfante en el Puente Pueyrredón se devoraría al gobierno que presentara el dislate de la convivencia entre violadores y víctimas.
Ahora –según encuestas-, el 87,5% de repudio en GBA al fallo del 2x1 impulsado por la burguesía nacional y sus concejeros de sotana tuvo, como desde 1976 en todo el mundo, una repercusión generosa y valiente de rechazo de los argentinos migrantes. Así el domingo 7/5/17 el propio Bergoglio sufrió el escrache de dos docenas de compatriotas que con carteles repudiaban el 2x1 en la plaza San Pedro en el Vaticano mientras Francisco desde la ventana practicaba el truco del agua y el vino. El día 10 otra vez volvieron los argentinos con carteles a la Piazza San Pietro, recordándole al Papiso que queremos derrotar la impunidad.
El cachetazo popular es para los jueces, el gobierno, la Iglesia y la oposición de los Massa, PJ, FpV y Stolbizer que votaron a los carapintadas.
El PO/FIT en el Congreso y en las calles va por el juicio político a la Suprema Corte.
La burguesía nacional ha dado acabadas muestras de su incompetencia para dar una solución popular; los trabajadores con las próximas crisis darán repuestas para terminar con el gerenciamiento capitalista.
(*) Del Partido Obrero