El herido y principal sospechoso del robo que terminó con el policía asesinado en Wilde, se llama Eduardo Satelle, tiene 19 años y es hermano de un policía local de Lanús, que no tiene buen concepto entre sus compañeros de armas.
Esto último lo destaca un profesional que tuvo a su cargo parte de la formación de este cuerpo, y que alertó en su momento -y renueva su atención ahora- de que la primera promoción de estos agentes municipales del orden, no fue monitoriada como es debido y “hay elementos que son peligrosos hasta para sus mismos camaradas”.
Y dice que los principales culpables de esta falta de filtro, fueron el secretario de Seguridad de entonces, Mariano Amore que ante la presión de algún concejal o funcionario -dicen que hubo uno que les pedá la mitad del sueldo a los ingresantes- le daba luz verde a elementos de dudoso comportamiento y su mujer, Natalia Marczuk (foto) que saltó de ser asistente social de la Policía Federal, a responsable del exámen psicotécnico de los aspirantes a policías de Lanús, cargo para el que de ninguna forma estaba capacitada según este fuente.
Recientemente, a una agente de esa primera camada le encontraron droga en el móvil.
Y a otro efectivo lo acusan de robarle el celular y dinero a un joven que detuvieron por resistencia a la autoridad.