Así, rodeado de custodia y sin presencia de vecinos, transcurrió esta mañana la visita de Nestor Grindetti y Jorge Macri a la sala Natiello que está siendo refaccionada.
Una señora que pretendía ingresar al acto, fue rechazada en la puerta: —Esto es un evento privado— le dijeron. La mujer esperó que saliera Grindetti, lo paró en la vereda y le reclamó airada por los cortes de luz que sufre en su casa de Chingolo.
Luego Macri, Grindetti y su comitiva fueron recibidos por el ex russista, Mariano Borquez, en un club de esa ciudad.