La subsecretaria de Acción Social
Mariana Paz (foto) terminó de sucumbir al golpe palaciego que se le venía encima y cayó de su puesto de subsecretaria de Desarrollo Social. Como se recordará, Paz había sufrido amenazas de la patota municipal y no la salvó ni ser la mujer del edil Jorge Schiavone, ni haber sido adalid de la campaña electoral de Nestor Grindetti intendente. Ahora la patota va por el secretario de la misma cartera, Emiliano Bursese quien ya se salvó de dos golpes palaciegos. Y aunque la cara visible del golpe es la puntera-directora Jesica Velazquez, cada vez se hace más patente que la patota que se quiere “quedar con la municipalidad”, es el terceto Adrian Urreli, Diego Kravetz, Carlos Ganduglia. Y vaya un botón de muestra: En reemplazo de Paz, va Marcelo Villa, subsecretario de Gobierno y mano derecha de Urreli.
Ahora dicen que el objetivo del trío es destituir al radical Bursese y poner a Salas y a la maleable Noelia Quindimil, al tope de Políticas Sociales.
¿Néstor Grindetti puede estar ajeno a esta maniobra? El que piense eso es un inocente: el trío Urreli, Kravetz, Ganduglia, obedecen a rajatabla lo que este intendente ordena.