miércoles, 16 de marzo de 2016

24/3: Cárcel común a Pedraza y a los genocidas

por Lisandro Martínez*

  Entre 1976 y 1983 el terrorismo empresario/militar (T/E/M) fue la experiencia más horrorosa de la historia de Argentina. La crueldad del T/E/M empequeñeció otras sanguinarias iniciativas patronales como los fusilamientos de la Patagonia, la masacre obrera de la semana trágica, el bombardeo a Plaza de Mayo, la desaparición forzada del médico comunista Juan Ingalinella o los fusilamientos en los basurales de José L. Suarez.
  Del raconto histórico de las barbaries queremos destacar el secuestro y la desaparición forzada de Juan Ingalinella un dirigente del Partido Comunista, detenido el 17/6/1955 en el segundo gobierno del Gral. Perón. El 16/6 la aviación bombardeo Plaza de Mayo y masacró a más de 300 personas sin que el PC tuviera nada que ver pero a la tarde del 17 la cana fue a buscar a Ingalinella a su casa de Rosario y lo detuvo. La razzia  incluyó, a otros del PC como Guillermo Kehoe y Alberto Jaime. Estos fueron liberados de la comisaria luego de torturarlos. Ellos dieron la noticia que Ingalinella había muerto en la sala de torturas a manos del comisario Francisco
Lozón. (www.ellitoral.com 7/7/2010)
El cuerpo de Ingalinella jamás apareció. Las peripecias investigativas para dar con el cadáver, calcan los tortuosos laberintos que hubo que transitar entre 1974/1975 con la Tripe A y entre 1976/1983 con los milicos. Los registros de la poli en 1955 fueron adulterados, a los libros de las comisarias les arrancaron hojas. Nadie veía, nadie escuchaba, nadie sabía. Igual trascendio que  el cadáver fue enterrado en la estación de trenes de Ibarlucea, cerca de Rosario, allí encuentran un pedazo de tela del abrigo de Ingalinella. El policía Rogelio Texié  uno de los secuestradores se quebró y habló. Esto sirvió para que secuestradores y asesinos fueran condenados –entre ellos Texié- a penas de entre 15 y 20 años. 
Esa primera iniciativa de hacer desaparecer cadáveres fue un antecedente que el creador de la Triple A. desempolvó apenas aterrizó el 20/6/73 en la base aérea de Morón.
  Todas las hipótesis sicoanalíticas o siquiátricas “del Mal radical y la banalidad del mal” que le intentan dar un toque esquizoide a quienes instalaron la represión, la desaparición de personas, los campos de exterminio, las torturas, los robos de niños y toda clase de violaciones choca con la realidad: aquí la patronal y el imperialismo impusieron cambiar las normas laborales, así fue que hubo 30.000 desaparecidos la mayoría trabajadores. 
 El imperativo “Nunca más” en 1985 lejos de ser un acto de contrición fue y es una amenaza directa  para que los luchadores no vuelvan a oponerse a los dictados internacionales, eso en el régimen post dictadura  se subrayó con las leyes de punto final en 1986 y obediencia debida en 1987.
 A 42 años estamos ante el mismo programa económico con aquellos mismos principios e incluso con un agravante que para obtener el cash que alimente a las camarillas de Macri, FR (UNA), GEN. Por eso gobernadores e intendentes del PJ y el FPV apoyan un empréstito que supera las condiciones leoninas del pacto Baring Brothers. El endeudamiento somete al país a un nuevo status que es el de “Colonia de los centros financieros internacionales”.
  En ese camino Macri liberó a Pedraza a cambio de que la burocracia sindical le asegure vía libre para que la represión social haga pasar el ajuste. (Cresta Roja, Docentes de Santiago del Estero, etc.)
Los ataques a los movilizados ya están, mientras los panqueques del PJ en extinción saltan el cerco y se entregan al frenesí derechista: Nicolás Russo, Carlos Simino, Norberto Luciani, Marcos Montenegro y Juan C Cobas (La Defensa 5/3/16). Y otros fpv y massistas en nombre de la unidad pejotista: Raúl Cosenza, Hernán Lakota, Irene Ballestero, Jorge  Coassini, Roberto  Díaz, Carlos Daglio, Claudia Serapio y Alberto Lobo no tienen limites y se reúnen con Julio Yessi fundador de la Triple A. (La Defensa 9/3/16)
   Para el pueblo argentino la liberación de Pedraza (prisión domiciliaria sin guardia) alecciona sobre la naturaleza podrida de un régimen político dedicado a proteger a genocidas y a patronales que organizaron la desaparición opositora para ir a un régimen laboral basado en la Ley de contrato de trabajo 20744 del gobierno peronista de 1974. La 20744 permitió el trabajo eventual y precario una modificación retrograda de la legislación laboral que barría con 30 años de conquistas y dio píe que se impusiera el trabajo contratado y en negro que desde hace 25 años ronda el 40%.
En síntesis las movilizaciones tenaces (30 meses para que encanaran a Pedraza)  pueden lograr condenas a los asesinos pero no cambian los genes del Estado capitalista. Esto destaca la necesidad de dotar al movimiento obrero de una dirección que le dispute el poder político a los capitalistas , para dar vuelta la tortilla de la historia. 
La liberación de Pedraza –un muerto político y sindical- es una fuerte señal del régimen del capital que resguarda a los Pedraza como a los genocidas este personal les ha dado enormes servicios para imponer la explotación más atroz del trabajo ajeno y el enriquecimiento de una clase social. La liberación de Pedraza que planificó el ataque criminal a una movilización que reclamaba, es un antecedente que podrán utilizar –sin ir prisión- los patoteros que anidan en los sindicatos para que pase el ajustazo y la entrega del país. A esto se suma el sobreseimiento de Oyarbide a los jueces involucrados en las coimas donde estaban por un cumulo de pruebas hasta las manos junto a Pedraza y pone al desnudo la voluntad política de dar el punto final a la causa por el asesinato de Mariano y a sus investigaciones derivadas.
Desde 1955 con el golpe gorila la CGT resolvió que el 17/10 fuera día laborable aún con esa zancadilla el ausentismo organizado desde abajo fue altísimo. Por ese fenómeno de rebeldía obrera, el ministerio de Trabajo en 1956 decidió terminar con las Comisiones Internas “son como un ejército donde mandan los soldados y no los jefes” (Revista Que 25/4/1956) Luego vino el pacto con Frondizi, Peronismo sin Perón, desensillar hasta que aclare con Ongania, Gran Acuerdo con Lanusse, 3 A, ley antisubversiva, prohibición de huelgas, aniquilación de la subversión, Luder/Herminio y ahora el apoyo a Macri.  
  La crisis de la deuda y el ataque a las condiciones de vida tienen solución social si los trabajadores ponen en pie una nueva dirección que dé la espalda al PJ el gran organizador de derrotas obreras en estos 60 años.
   (*) Del Partido Obrero