A eso de las 18:00 se desató un tiroteo infernal en las inmediaciones de la estación Lanús, cuando la policía interceptó a delincuentes que habían secuestrado a punta de pistola un colectivo de la línea 179. “La gente llegó a bajar, pero al pobre chofer lo llevaron con el arma en la cabeza manejando. La gente corría y gritaba por la estación al tiempo que otros delincuentes robaban a los que pasaban. Fue terrible”, relata Alejandra que en esos momentos descendía del 405.
La policía abatió a uno de los criminales e hirió a otro. Y al parecer el colectivero también resultó herido, en la ingle. El ulular de las sirenas fue impresionante a esa hora por el centro de Lanús.