por Lisandro Martínez*
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El capitalismo de los “Niembros” bajo el “nom de guerre ‘Sigamos’” transforma penurias sociales en negocios propios.
Luego de revisar el desastre organizativo de distribución de electricidad y el paupérrimo servicio que ofrece Edesur en el partido de Lanús, Nestor Grindetti y Diego Kravetz con sus abogados reconocieron que “es técnicamente imposible brindar una solución inmediata a los cortes del suministro eléctrico” (www.infocielo.com 30/12/2015).
Grindetti quiere reeditar, esta vez con la privatizada Edesur, la genuflexión del ministro de Economía Juan Carlos Pugliese que lloricoso dijo en 1989, cuando intentó frenar la corrida bancaria: “A los usureros les hablé con el corazón y me contestaron con el bolsillo”. Dicen los zoólogos que ningún animal se choca dos veces con la misma piedra, excepto el hombre. Grindetti para retornar a esa estúpida situación aprieta el “replay” declarando a los medios: “No pretendo que a partir de hoy no salte ninguna cámara ni ningún transformador más, lo que sí pretendo es que estén (Edesur) acá codo a codo para ver que necesitan los vecinos y como hacemos para arreglar esto”.
El monumento a la estafa al pueblo de Lanús -el centro de monitoreo donde las cámaras a los únicos que siguen es a los que van a trabajar- fue el escenario elegido por Grindetti para
hablar y en un paso de comedia sobreactuado declarar: “Hemos llegado a una situación límite y Edesur tiene que hacer algo para ayudar porque es corresponsable de esto”.
La significación semántica de corresponsabilizar a alguien que contrataron los funcionarios capitalistas anteriores de los cuales “sigamos” es la continuación, es por lo menos la confesión de la inutilidad de los contratos firmados que además revela un secreto a voces: la complicidad histórica desde 1991 a la fecha con los privatizadores, a los que ningún gobierno de la burguesía osó denunciar, auditarle los libros, llevarlos ante la justicia nacional y que ésta los castigara recuperando la guita afanada al pueblo trabajador y poniendo a los responsables a la sombra. Esto no lo han hecho ni lo harán los gobiernos “progresistas”, ni los derechistas porque significaría reconocer la complicidad de los que ocuparon las máximas responsabilidades del estado durante un cuarto de siglo y el colaboracionismo de las actuales autoridades.
Para el sentido común del populacho -que no somos quienes manejamos los negocios capitalistas- ¡Edesur ya fue; no puso una sola moneda durante décadas! Si desde los gobiernos de la Alianza, Néstor K y ahora el de “sigamos” hubieran desconocido la vigencia de los contratos por sus atroces violaciones e irregularidades, las normas contractuales no tendrían vigencia alguna por el incumplimiento permanente y por violentar DDHH elementales. Pero ojo al piojo: patear el tablero montado por los capitales financieros para vaciar los países semicoloniales como Argentina, necesita basarse en una política independiente de los centros financieros y de atributos muy desarrollados, porque a lo que se enfrentaría no es a los escombros residuales de Edesur sino a los dueños del mundo.
Lo absurdo de esta catástrofe humanitaria sin salida es que “Sigamos” en Lanús y en el gobierno nacional quiere aumentar las tarifas de servicios para que funcione ¡como corresponde! una empresa que desde hace 25 años por contrato fue “atada con alambre”: 1. Las inversiones todas fueron hechas por el Estado Nacional y casi ninguna se concretó porque “la biyuya” se escabulló en pasillos del funcionariado que comió migajas y las empresas monopólicas internacionales que exportaron esas remesas como ganancias a sus casas matrices. 2. Los subsidios garantizaban la tasa de ganancias en dólares exigidas por las empresas, por lo tanto eso también se fugó a los países centrales con la anuencia de nuestros eméritos gobernantes.
Ahora Grindetti quiere hacer una demanda colectiva a Edesur. Esto subraya que Cambiemos no tiene nada nuevo que ofrecer al trabajador contribuyente y revela que “los equipos” macristas carecen de ideas, son improvisados y elementos ahistóricos. Un lustro atrás el pejotista Aníbal Regueiro demandó en Presidente Perón -un municipio del sur profundo- a los piratas internacionales, entonces hubo un fallo que determinó que Edesur debía invertir $414 millones en ese distrito. EDESUR ignoró el fallo y como resultado en 2011 hubo un proceso de levantamiento popular con piquetes en cada esquina por reiterados cortes de energía, rotura de artefactos eléctricos, pérdida de mercadería por falta de refrigeración, etc. Además los vecinos organizados independientemente de Regueiro y su runfla detectaron la inseguridad pública mortal vía las obsoletas redes que presentaban fallas en los elementos de protección electromagnética.
El 29/12 aprovechando el shock que describe Naoemi Klein, Grindetti firmó dos decretos: el N°3136 utilizando la “emergencia eléctrica” por el término de un año y con el voto de “opositores K y otros”, declarando la Emergencia y la construcción de un Centro de Transformación en el HCD. Ese decretazo autoriza al Ejecutivo municipal a iniciar la ronda de negocios en la obra pública sin la autorización ni el control del soberano. “Sigamos” podrá realizar todas las contrataciones y erogaciones que se deriven de la emergencia. Y el Decreto Nº 3137(Ordenanza Nº 11982) que determina la construcción de un Centro de Transformación en el HCD.
Los “niembros” apurados por llegar antes de marzo, el 29/12 vía deliberante metieron “La emergencia sanitaria y ambiental”. Martin Medina de “Sigamos” propuso 1. La contratación de empresas privadas para remover basurales. 2. pasar por arriba del proceso de licitaciones lo que señala compras directas. 3. Adquisición de máquinas. En Salud abogó por un régimen que garantice la medicina prepaga (inicio de la privatización) y contó con el voto de todos los bloques; esto indica que el presupuesto alimentará a todos. La Defensa del 31/12/15 adelantó que adrede hay material rodante abandonado en las salas y sin mantenimiento.
El cuadro de compras directas, la contratación de los “niembros”, la falta de control de un Concejo Deliberante sin tribunos del pueblo, dotarán al ejecutivo de una chequera sin límites. Es un régimen que debuta en Lanús y será “Argentina for Export” para consumo de todo el país hasta que la clase obrera diga basta.
(*) Del Partido Obrero
