¿Ni un pibe afuera?
En el paseo del acceso Lebenshon, el hombre descansa en el colchón mientras su mujer y su hijo -que viven con él bajo las estrellas- salieron de recorrida para procurarse unas monedas. Así, a toda orquesta culmina -¡por fin!- la tarea de la secretaria de Niñez, Zulma Pesagno de Carli, que será recordada por sus ausencias del cargo o por su fastuosa boda, pero no por lo que hizo por los chicos desvalidos.