martes, 20 de octubre de 2015

Los vecinos necesitamos educación de calidad

por Marcelo Boffa

Hacia fines de 2006 varios centenares de maestras jardineras autoconvocadas de este distrito junto a sus compañeras del resto de la provincia, acompañadas por especialistas, algunas inspectoras, unas cuantas expertas y miles de familias de barrios populares derrotaron uno de  los experimentos pedagógicos más aberrantes del kirchnerismo: La “ley Segarra”, a la que lograron desactivar, disolvía 60 años de trabajo especializado del Nivel Inicial en la provincia, legalizando un sistema en el que avanzaba un “cuidado de niños”, cogestionado por organizaciones sociales amigas del gobierno.
En 2010  publicaban que mientras haya un kirchnerista gobernando, los jardines continuaban en peligro y no se equivocaron. Hoy se encendieron las luces de alarma en la OMEP. La filial
argentina de la prestigiosa Organización Mundial para la Educación Preescolar alertó sobre el riesgosísimo proyecto de ley de la diputada kirchnerista Bianchi, que establece un régimen nacional de cuidado de niños, haciendo caso omiso del largamente declamado “derecho a la educación” y de todos los esfuerzos históricos nacionales e internacionales por la extensión y el desarrollo de la educación infantil. 
Nuestro Nivel Inicial consta de dos ciclos. El de los jardines maternales, que abarca desde los 45 días hasta los dos años y el de los jardines de infantes, desde los tres a los cinco años.
La falsa polaridad entre “educar” y “cuidar” que violenta décadas de investigación en Nivel Inicial, fue forjada desde la fantasía contradictoria y reaccionaria oficialista del paulatino reemplazo de una formación especializada del Nivel por una formación “rápida” de cuidadoras militantes, durante la gestión  Kirchner-Solá-Puiggrós
Es fácilmente imaginable la creación de circuitos “de primera” y  “de segunda” a partir de estos experimentos “nacionales y populares”
Según datos de Mauricio Macri, en el país 638000 chicos de sala de 3, 4 o 5 años no tienen Jardínes de Infantes (se trata del único presidenciable que ha levantado el tema) y  María Eugenia Vidal grabó un clip promoviendo la  necesaria construcción de Jardines Maternales
Para los docentes, directivos, y comunidades de los jardines de Infantes  (que los hay de toda ideología y color político) la disputa entre Scioli-Anibal Fernandez-Julian älvarez  y Macri- Maria Eugenia Vidal –Nestor Grindetti, no puede resultar neutra, aséptica o indiferente.  
Para todos los que, de una u otra forma, integramos  la base del sistema escolar del distrito, en sus diferentes niveles, tampoco. Son demasiados años de abandono, maltrato, parcialidad y mal uso de los recursos. Demasiados de amiguismo sindical-gubernamental. Demasiados de desjerarquización profesional. Demasiados de castigo para quienes hacen bien su trabajo pero piensan distinto. Un cóctel pesado que tiene en nuestros alumnos  a sus principales víctimas. 
 Se puede ser de centro, de izquierda, liberal o socialista. Se puede ser peronista o radical. Pero quizás estemos ante una oportunidad histórica de que nunca más experimentemos la humillación de directivos poniéndose una camisetita de La Cámpora para que le corten el pasto o le pinten su colegio. 
 Hay una larga tarea institucional por delante que no va a ser  el desafío de una gestión sino una construcción de todos. También en Lanús, el punto de partida (no de llegada) es que cambiemos.
   (*) Escritor e integrante de Cambiemos