lunes, 12 de octubre de 2015

Darío + Julian = unidad para el triunfo

por Omar Dalponte

omardalponte@gmail.com 
     
Nuestros candidatos son Daniel Scioli, Anibal Fenández, Darío Díaz Pérez, Julián Álvarez y todos los compañeros que integran las listas del Frente para la Victoria. En un acto de comprensión de la realidad política el kirchnerismo decidió proponer a la fórmula Scioli- Zannini que, a escasos quince días del acto electoral, se perfila como la que obtendrá la mayor cantidad de votos. Se percibe un claro triunfo del FpV pero, elecciones son elecciones y uno no debe ser irrespetuoso en lo que respecta a las decisiones del pueblo. Estamos trabajando para un triunfo en primera vuelta de nuestra fórmula presidencial, por la victoria de Fernández –Sabatella en la provincia de Buenos Aires, por conseguir el mayor respaldo electoral para
Darío Díaz Pérez en la Tercera Sección Electoral y por garantizar que Julián Álvarez sea el próximo intendente de Lanús.
En todo este proceso previo a las elecciones generales valoramos que en nuestra ciudad la campaña se lleve a cabo con total normalidad dentro de un clima de respeto mutuo y que las distintas fuerzas políticas ocupen los mismos espacios en lugares públicos tratando, democráticamente, de hacer conocer sus propuestas y candidatos. Creemos que esta actitud civilizada de los competidores puede ser un buen antecedente para los días que seguirán al comicio. Después del resultado electoral habrá que gobernar y seguir construyendo la ciudad del futuro que los lanusenses merecemos. Díaz Pérez deja para el próximo gobierno comunal una ciudad infinitamente mejor que la que él comenzó a gobernar en 2007. El intendente, cuyo mandato culmina en diciembre, contra viento y marea ha realizado una gestión muy positiva tanto en obra pública como en la defensa de los derechos humanos y de la actividad cultural.
Todo parece indicar que el triunfador será Julián Álvarez. De ser así él dará su impronta a la nueva gestión y quienes apoyamos su candidatura tendremos la responsabilidad de acompañar al nuevo gobierno municipal conservando lo realizado y aportando ideas y acciones para el futuro. Hay mucho por hacer en favor de la dignidad, la paz y el bienestar integral de nuestro pueblo. Esto no es tarea para una sola persona o un sólo sector y no somos pocos los que pensamos que pasado el acto electoral habrá que promover un encuentro amplio entre quienes estén dispuestos a trabajar por el progreso de Lanús.
El espacio kirchnerista tiene sus planes, la voluntad de realizarlos y cuenta con cuadros políticos de gran capacidad de gestión. Pero es imposible, en soledad, dar solución a todos los problemas y superar exitosamente situaciones tales como la pobreza, la falta de viviendas o los problemas de inseguridad si no se logra la participación efectiva de gran parte de los sectores políticos, sociales y culturales mediante un acuerdo que permita elaborar y concretar el gran proyecto de ciudad que necesitamos.
El 25 de octubre algunos ganarán y otros no habrán conseguido alcanzar sus objetivos. Lo que es necesario garantizar es que no haya perdedores, que los triunfadores actúen con grandeza y que quienes no hayan sido favorecidos por el voto popular estén dispuestos a actuar sin resentimientos. Hay personas muy respetables y valiosas que por diferentes razones o por las roscas de la politiquería barata no han podido concretar sus aspiraciones. Hay también una dirigencia opositora con vocación de diálogo a la cual será necesario convocar para la gran tarea que debemos llevar a cabo los que queremos el bien de la comunidad. Nada de lo que decimos es imposible ni se debe pensar que es un deseo irrealizable. En Lanús están dadas las condiciones para un entendimiento civilizado e inteligente. Sabido es que quien escribe esta columna pertenece a la actual gestión municipal y apoya de manera irrestricta las candidaturas de Darío Díaz Pérez y  de Julián Álvarez. Pero también es público y notorio que mantiene excelentes relaciones personales con todos los referentes del arco opositor en un marco de afecto y respeto mutuo. Así es que desde su trabajo, en una función abierta a toda la comunidad, puede matear con Noelia Quindimil, con Néstor Grindetti o saludar afectuosamente a Nicolás Russo. Y esto ayuda a la convivencia democrática entre quienes pensamos de distinta forma.
  (*) De Iniciativa Socialista