sábado, 5 de septiembre de 2015

Caballos: grosero desaire a proteccionistas

por Marta Santos

A veces algunas situaciones confusas dan lugar al enojo y a diversas especulaciones. Somos periodistas pero somos personas. Lo mejor es enfriarse y volver a hacer un análisis de las circunstancias. Ayer me enojé mucho porque Susana y Juana no fueron atendidas como yo creo que merecían, teniendo en cuenta que la invitación a que asistieran provino del mismísino vice ministro de Justicia de la Nación. Las explicaciones posteriores y las distintas fuentes aclararon el panorama, aunque hay un punto que no me
convence demasiado.
Lo cierto es que por la mañana me cercioré que la invitación a la reunión me incluía y por eso concurrí. A las tres menos cuarto estuve en la sede del ejecutivo municipal para una reunión que se realizaría a las tres. Ya estaban reunidos el intendente con el fiscal general de Lomas, Enrique Ferrari, a los que se sumó Julián Álvarez.
  Mientras esperaba a las proteccionistas para el comienzo de la segunda reunión -la primera era privada entre los representantes de la Justicia y el intendente- llegaron los fiscales, calculo que entre quince y veinte, casi todos muy jóvenes. Esperábamos en el jardín hasta que nos llamaran, la abogada de APRE, el médico veterinario, las proteccionistas y yo. De pronto los dos primeros desaparecieron: pensamos que habían ingresado al hall. Al rato Jorge Montero apareció para decirnos que subiéramos al despacho del intendente, donde se realizaría la reunión. Los fiscales habían partido y sólo quedaban el intendente, el vice ministro y el fiscal general. Cuando subimos nos enteramos que la abogada y el veterinario estaban en reunión con el fiscal general. Esperamos que nos hicieran ingresar.  Como no sucedía reclamé por la parcialidad con gente que había sido invitada. Y mientras tanto Alvarez y el fiscal salieron, el primero saludó y partieron. Nadie entendía nada. Nos fuimos.
  Después, vía telefónica, llegaron distintas explicaciones: que al vice ministro lo llamaron urgente desde Nación, que nadie le informó que había más gente esperando, que todo se desordenó y los tiempos no alcanzaron, que... Que Álvarez le pidió a los fiscales que estuviesen más atentos al maltrato animal aplicando la ley 14346 -nacional- y que estudiaran cada situación de maltrato porque puede conllevar a venta de droga, robo de animales y otras. Así quedarían judicializados.
   De aplicar ley provincial de tránsito que prohibe la circulación de equinos, que es lo que en principio reclaman las proteccionistas, nada. Porque hay que hacer el reemplazo en forma gradual, cuando se convenza a los recolectores que deben trabajar de otra forma y se les faciliten los medios para ello. Tal como lo propusiera el vice ministro en la reunión de comisiones y antes el concejal Oscar López y Susana Lauro en sus proyectos ya presentados., que contienen algunas diferencias.
   Esta nota es muy larga y de crónica no tiene nada: es simplemente un relato. Por eso les cuento además que no me convencen las explicaciones pero las acepto hasta que no logre desentrañar la verdad de la milanesa. Y en eso estoy.
Porque la designación del fiscal general, miembro de Justicia Legítima, fue impulsada por Álvarez, cuestionada por parte de miembros de la Justicia, aprobada en el Congreso. Dicen algunos que es garantista y que dispone que los caballos que son rescatados sean devueltos a sus dueños. Dicen, aún no me consta. Estoy en ello.
   Lo cierto es que hay una ley que no se cumple y es porque la realidad de un sector desprotegido se impone. Pero si, como expresó Luciana Agustavicius, en el lado oeste del distrito los recicladores urbanos están organizados y no usan los caballos, quiere decir que hay una receta que dio resultado. Es cuestión de repetirla en el este de la ciudad y sanseacabó. Pongan pila, muchachos, que se puede. ¿Tan difícil es?