La primera sorpresa de los massistas que ayer concurrieron al plenario convocado por Nicolás Russo fue que éste no estaba presente, porque estaba en El Tigre con Sergio Massa, según se avisó. La segunda fue que el presidente del plenario fue Hugo Lico, ni más ni menos que quien planillas en mano, aseguraba que a Russo lo iba a votar el 45 por ciento.Aparte de esta situación, la orden de trabajo fue salir a redoblar esfuerzos para las elecciones de octubre, con las sombrillas funcionando desde las 15:00 en los centros comerciales y todo el mundo debe salir a timbrear para “Russo intendente”. También se habló de salir a repartir tijeritas para los que quieren cortar boleta.
“Hay que aclarar que gran parte de militantes en el espacio del russismo se mantiene latente,
que por el contrario son unos pocos que decidieron retirarse, en una muestra de debilidad que no presentan el valor para afrontar el resultado obtenido para hacerlo valer en la final de octubre”, le señala Antonio D’Agostino a La Defensa.
“El colmo fue cuando Gustavo Parrilla, uno de los candidatos, retó a la audiencia y les dijo que esta reunión era para decirles lo que tenían que hacer para juntar los votos y no un plenario. Ante el disgusto de los presentes, que consideraron una falta de respeto la reunión de 20 minutos, los ánimos se fueron enrareciendo”, cuenta por su parte un militante que pide reserva de identidad.
“Si quieren ser concejales, empiecen a juntar plata para la fiscalización. No trabajo para Ferreti, ni para Simino. Gratis no hay nada”, manifestó un dirigente de Villa Diamante.
