Nuevamente aparece el viceministro de Justicia de la Nación, Julián Álvarez, involucrado en un caso de la mafia barrabrava. Ahora, su abogado penalista preferido, Javier Raidán, es el defensor del Adrián “Panadero” Napolitano, el alsinense autor del atentado contra los jugadores de River. Raidán como se recordará, fue el defensor de El Polaquito Soto -barrabrava de Lanús- y de su padre, cuando fue asesinado el Gallego Fernandez, el barra de Independiente.
Y Raidán -ex defensor de policías, entre ellos los acusados del doble asesinato de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán- fue impulsado por Julián Alvarez el año pasado como director titular de la Caja de Previsión de la Caja de Abogados, del departamento judicial Avellaneda–Lanús.
Ahora bien, volviendo al Panadero, éste no es un “perejil” como se lo intenta hacer pasar,
sino un conspicuo integrante de la fracción de Roberto Digón que hoy apoya la postulación del sindicalista Victor Santa María (h), para presidente de Boca, como parte de la embestida K contra el macrismo. La señora de Digón, jefe político de Panadero Napolitano, es Silvia María Eva Gottero, tercera en la lista de candidatos a legisladores porteños del Frente para la Victoria. En la interna de Boca, Mariano Recalde también apoya a Santa María.
Como se recordará, Julián Alvarez nunca negó las vinculaciones que con los anteriores hechos fueron publicadas.
En la foto, ayer Alvarez paseaba por Valentín Alsina, su candidatura a intendente de Lanús.