La reconocida escritora lanusesnse, Mabel Segurado (foto) regresaba del trabajo -es profesora de matemática y física en varias escuelas- el miércoles 4 de marzo y oh sorpresa: encuentra una llave del lado de adentro de su puerta. Entonces toca timbre y sale un sujeto -al que identifica como Rubén Corral- con dos tipos con pinta de matones y cuando ella empieza a gritar intentan meterla dentro del departamento, el 4ºB de Sarmiento 1601 en Lanús E. Mientras llaman a la policía, los vecinos le avisan a Segurado que ya los tipos habían sacado bolsas de la casa. Arriba una agente de la seccional 2ª, y como el okupa exhibía una fotocopia, la policía se negó a proceder: -Es su palabra contra la de él- dijo la “ley”, y no hizo nada aunque Segurado le
imploraba que ella vive allí, que tiene la escritura ya que está haciendo la sucesión de su madre fallecida, a quien este mismo Corral había intentado usurparle su departamente en 2007, aduciendo que le había prestado plata.
Lo cierto es que ahora la casa de Segurado tiene una franja judicial, y ella vive en casa de su hijo, esperando que la UFI Nº18 se expida en su causa, 13059/15, y eso a pesar de que ya en la usurpación anterior la justicia demostró que Corral se valía de un papelucho para justificar su intrusión.
Los vecinos ponen a la portera del edificio de Segurado bajo la lupa, y son muchos los que sostienen que este Corral actúa de esta forma porque cuenta con una red de funcionarios, martilleros y escribanos cómplices.