viernes, 13 de febrero de 2015

Puerto Madero en Lanús: “Sin City”

por Lisandro Martínez*

lisandomartinez47@yahoo.com.ar 

El crimen de Estado del que fuera victima un fiscal de la Nación asociado a servicios secretos, y enfrentado con el gobierno en descomposición, muestra un  régimen político sin salida y permite al ciudadano atento sacar innumerables conclusiones sobre la inviabilidad de la “democracia” parida contra natura por los servicios, la dictadura en fuga y el imperialismo en 1983. 
  La novedad es que para el Financial Times: “Argentina es un Estado chueco” (La Nación 6/2/2015)  desentendiéndose del engendro nacido por iniciativa de los brokers que obligaron a aparearse a una babosa (la multipartidaria) con un usurero (FMI). 
  El escenario donde se ejecutó el crimen de Nisman no podía ser más emblemático, es “la ciudadela” soñada por la fauna especuladora, del mandato privatizador noventista cuya voracidad por expropiar al fisco de bienes públicos lo llevó adelante el “crisol de razas y de credos” participaron de la distribución gratuita de las mejores tierras públicas, explotadores católicos, musulmanes, y sobre todo sionistas quienes aprovecharon las ventajas brindadas por “la democracia” para “milagrosamente batir el record de tenencia
de propiedades y campos que ostentaba la Iglesia Católica en el país.
  El dato no es menor a la hora de revisar que corruptos de toda índole, especuladores “progresistas” como Joan Manuel Serrat, funcionarios gubernamentales, cuevas como “La Rosadita” y hasta asesinos como Pedraza son propietarios de “la ciudad cerrada” provista con la mayor –dicen- seguridad personal, un bolazo que ha quedado expuesto hasta el grotesco y que por extensión ridiculiza los negocios de la seguridad con cámaras, botones antipático, cerraduras con combinaciones cifradas y todo el cotillón que venden Scioli, Massa y los demás candidatos de “la opo” y también el “buche” Berni descubierto intentando -una vez más- ingresar a la escena del crimen para direccionar la investigación como hizo con el portero.     
  Con la seguridad de quien distingue a los “vivos que viven de los zonzos” que en general habitan Puerto Madero, Omar Dalponte lo señaló: “Para colmo el hecho se produjo en una zona regada por la baba de la tilinguearía: sitio que muchos tontos consideran un paraíso de placeres”.
  Frank Miller yanqui, escritor, ilustrador y creador de novelas policiales negras, publicó en 1991 Ciudad del Pecado (en ingles Sin City) cuya enorme popularidad le permitió hacer del libro una sensacional película que codirigió y estrenó en 2005. La ciudad que en la novela se llama Basin City está divida en barrios, bares, clubes de striptease, muelles y lupanares en un paisaje árido y sórdido donde mandan la pobreza, la ausencia de todo tipo de porvenir y la violencia. En esos lugares la policía corrupta ha abandonado las calles. Sólo algunos policías son honestos. Los ricos de la ciudad sobornan a policías para garantizar sus negocios. El barrio rico se llama Roble Sagrado y está rodeado de una hermosa arboleda. Allí habitan toda clase de inescrupulosos: el obispo, el procurador, etcétera, y  la zona es patrullada por hombres armados con equipos SWAT, pertrechados para la guerra. ¿No es este acaso el sueño dorado de la seguridad  de los narcos que habitan los country del GBA? 
  Siempre la realidad supera a la ficción. Y en Puerto Madero donde se regalaron tierras a buitres y se planteó socialmente la más retrograda especulación inmobiliaria, el crimen de Nisman ha sacado a la luz parte de la porquería capitalista. Queda claro que la seguridad pública no se establece a bayoneta calada sino garantizando que el porcentaje  más grade de la riqueza social vaya a las mayorías populares que son quienes las producen.
  El Poder Judicial no puede escapar del modelo de explotación que le dio origen y aunque un grupo de fiscales pretenda victimizarse,  la connivencia Justicia/SIDE especialmente encubriendo la violación de leyes por esos servicios delata, que las maniobras de impunidad están en los genes de los dos organismos. La violencia contra las causas populares, el encubrimiento de espionaje contra militantes, la impunidad en los crímenes de estado (la masacre de 33 personas en el Argentinazo en 2001, la muerte de Kosteky y Santillán en 2002 en Puente Pueyrredón, la  Emboscada de Barracas en 2010) más un rosario de perejiles que van a la cárcel pagando delitos del poder, ilustran la debacle.
   La causa de coimas para que Pedraza zafara encarada por jueces y Riquelme de la SIDE está en el freezer. El juicio por el asesinato de Mariano no tomó el camino de leyes existentes que condenan a los autores intelectuales sino el relato, un verso delirante del juez Días, que dejó de lado la condena a perpetua y exculpó a los concesionarios de UGOFE. El “cajoneo”  del Proyecto X con la responsabilidad del ejercito en el espionaje -prohibido por la ley- sobre organismos de lucha y partidos políticos. Las causas de desaparición de Julio López donde no hubo ningún tipo de investigación sobre sus responsables. La parálisis de la causa Arruga que con la aparición del cadáver del menor imputa de entrada a la dirección de la bonaerense y sube hasta las responsabilidades políticas necesarias que ocultaron 5 años el cuerpo del pibe, primero torturado y luego masacrado por la yuta por negarse a robar para la “institución”. 
  La justicia es hija de un estado que ejerce el espionaje como método de control social y que por lo tanto actúa de espalda a los intereses populares. Esto se ve, se palpa y se sufre en las calles directamente cuando las movilizaciones son operadas por provocadores de los servicios. Lo que se trata de evitar es que los reclamos y las luchas del movimiento obrero establezcan sus triunfos en la vía pública y de cara a la sociedad. 
  Puerto Madero ha brindado su imponencia e impotentes métodos de seguridad pública para que se cometa el crimen de estado del que fuera víctima Nisman mostrando al que quiera verlo como ha pesar de la violación del escenario del crimen donde transitaron varios sujetos (el secretario de Seguridad, la madre, el médico, el juez, el fiscal, los custodios). La fiscal continúa recitando de memoria el milagro de los panes y los peces: “No se encontraron huellas que delaten la presencia de terceras personas”. 
   La metodología “Sin City” se instaló en Lanús de la mano de CFK ya que  Sergio Grosskopf titular del grupo Chateau Puerto Madero acusado por el fiscal Gonella de blanqueador de dinero vinculado a los bingos de la administración Scioli (lapoliticaonline 21/9/2013) es “dueño” de la siempre floja de papeles Campomar denunciada hasta por los propios militantes K como Centro Clandestino de Detención.
                                                                               (*) Del Partido Obrero