Lisandro Martínez (foto) consultado por La Defensa sobre la marcha del 18F, responde con esta extensa nota: "1. Voy a responder como militante organizado en el Partido Obrero, hago esta aclaración porque la cantidad de personajes grotescos de la política que abjuran de sus agrupaciones, se advienen a no marchar con sus banderas, ni con sus militantes organizados y para esquivar sus responsabilidades se declaran simples ciudadanos. Esto delata “cola de paja” a la hora de hablar con sinceridad, porque además pondrían de manifiesto la destrucción de sus partidos que para movilizar a alguien pagan como se le oye decir a D’Elia en las escuchas telefónicas “a la barra de All Boys le pague 25 luquitas”. Poner en la calle a la “militancia”
confesaría el raquitismo de sellos de goma que no representan más que a un par de individuos.
"2. La marcha está convocada por jueces, fiscales y políticos que se aprovecharon desde la salida de la dictadura de los mismos Servicios Secretos que están involucrados en todas sus variantes con los Crímenes de Estado contra el pueblo con los que han tratado históricamente de resolver las crisis sociales los gobiernos de Alfonsín, Menem, La UCR/Frepaso, los cinco gobiernos del Argentinazo y los gobiernos de Él y Ella. Es una impostura del cristinismo decir que no va a la marcha porque van fiscales y jueces que fueron encubridores del caso AMIA, cuando ese mismo gobierno amparó a un Poder Judicial impotente y cómplice de todos los agravios populares habidos.La marcha del 18F es singular: los encargados de proveer justicia salen a la calle a exigir la provisión de justicia al Estado al que representan. Entre los pliegues de fiscales y jueces se movilizan políticos que formaron parte hasta hace poco del gobierno, como Massa o Alberto Fernández, o conspiradores profesionales como Mauricio Macri, que inscribió como jefe de la Metropolitana a un encubridor del atentado a la Amia y organizó un servicio de espionaje paralelo. Unos y otros son responsables del proceso político que culminó con una guerra entre servicios y la muerte de un fiscal a cargo del tema más explosivo del país.
"3. Argentina se encuentra ante enfrentamientos que superan la capacidad de contención de un proceso electoral. El desmantelamiento de los aparatos de espionaje y represión no debe ser confundido con una posibilidad reformista del Estado actual, sino como una reivindicación que llevara a cabo el gobierno de los trabajadores
"4. El Partido Obrero no va a la marcha de silencio y sí convoca a la ciudadanía a sacar todas las conclusiones posibles sobre la debacle del régimen político para reclamar:
A) La apertura de los archivos, sobre la desaparición de personas desde 1975, la AMIA, Julio López, la masacre del Argentinazo, Kosteky y Santillán, Luciano Arruga y otros delitos contra el pueblo. ,
B) La destitución de Milani.
La apertura de los archivos (no sólo sobre Amia, sino sobre ladesaparición de Jorge Julio López, los asesinatos del 19 y 20 de diciembre de 2001, de Kosteki y Santillán; la desaparición de personas y otros numerosos delitos contra el pueblo) y la destitución de Milani. El desmantelamiento de los aparatos de espionaje y represión no debe ser confundido con una posibilidad reformista del Estado actual, sino como una reivindicación por el gobierno de los trabajadores.
Macri, Massa, los radicales, Binner, Cobos se han sumado al #18F; no tienen capacidad para convocar por ellos mismos. Pero la dirección electoral de la movilización es hacia los candidatos que se ponen a la derecha del gobierno.
El aparato pejotista de gobernadores e intendentes se ha quedado del lado del gobierno. Es muy tarde para abandonar el barco, salvo que salten todos los diques. Muchos K, sin embargo, sugirieron que el oficialismo se sume a la marcha “destituyente” (como Pampuro, Verbitsky y Brienza). Desde afuera, nadie quiere mover el piso: ocurre que no solamente progresan las negociaciones entre Estados Unidos con Irán en materia nuclear, sino también sobre el conjunto del Medio Oriente y Palestina. Se acaba de informar en forma oficial que los yanquis comparten información militar con Bashar al-Assad. Un eje Irán-espacio bolivariano ha quedado sepultado por la crisis venezolana y por las negociaciones de Obama con Raúl Castro. Los yanquis quieren que CFK se vaya por la puerta de ade! lante; los ajustes de cuentas quedarían para después. Ya tienen bastante con la perspectiva de una salida de Grecia del euro y con el retroceso militar y político que enfrentan en Ucrania. La salida ‘más barata’ para el imperialismo es que se vote en octubre.
"Iniciativa
La crítica de izquierda a la movilización derechista, como factor de clarificación, debe servir para arrebatarle la iniciativa. El próximo 8 de marzo, día internacional de la Mujer trabajadora, debe servir para ocupar las calles con reivindicaciones políticas; lo mismo más tarde, el 24 de Marzo, aniversario del golpe genocida. Esas reivindicaciones son la apertura de los archivos (no sólo sobre Amia, sino sobre ladesaparición de Jorge Julio López, los asesinatos del 19 y 20 de diciembre de 2001, de Kosteki y Santillán; la desaparición de personas y otros numerosos delitos contra el pueblo) y la destitución de Milani. El desmantelamiento de los aparatos de espionaje y represión no debe ser confundido con una posibilidad reformista del Estado actual, sino como una reivindicación por el gobierno de los trabajadores.
"Posición del PO frente a la Audiencia de mañana ante la crisis Nisman
En el día de mañana, a partir de las 12 horas, los diputados del Partido Obrero, quienes integran el Bloque del Frente de Izquierda y los Trabajadores, estarán presentes en el Salón Azul del Senado, para participar de la Audiencia Pública de Senadores y Diputados convocada en oposición a la sesión del Senado que tratará la nueva ley de Inteligencia propuesta por el Gobierno. Allí, Néstor Pitrola, quien integra el Bloque del FIT junto a Pablo López, quien también estará presente, tomará la palabra en representación del Bloque y fijará la posición del PO. También lo hará, entre las personalidades invitadas, el legislador del PO-FIT por la Ciudad, Marcelo Ramal.
Abajo reproducimos un documento político que se repartirá a todos los diputados y senadores presentes en la Audiencia, donde se fija la posición del Partido Obrero frente a la crisis política desatada por la muerte de Nisman y las maniobras distraccionistas del Gobierno en torno a una nueva Ley de Inteligencia.
"Un crimen de Estado, una crisis de gobierno y de régimen político
Por la interpelación al gobierno y la apertura integral de los archivos de inteligencia
La muerte del fiscal Nisman ha sido un crimen de Estado, que pone de manifiesto la responsabilidad política del Estado Nacional en una red encubrimientos que involucran a los aparatos de represión y espionaje, a la justicia, al gobierno y a todos los partidos que han gobernado en los veinte años de impunidad de la Amia. Y más atrás, desde 1983, porque han perpetuado los servicios y los métodos de la dictadura. Esos aparatos han sido encubridores y cómplices de la masacre de la AMIA. Pero también, de la provocación y el ataque a los luchadores y al movimiento popular, como ocurriera con Kosteki y Santillán, Jorge Julio López, Luciano Arruga o Mariano Ferreyra.
Este “Estado de Inteligencia” es la consecuencia necesaria de un régimen y un Estado que han gobernado para la protección de los intereses de las minorías capitalistas. Los mismos que protegen a los fugadores de capital y beneficiarios del negociado de la deuda externa y la entrega de los recursos estratégicos, los que nos han impuesto la precarización laboral, la miseria salarial y jubilatoria, la liquidación de la salud y la educación públicas.
La guerra interna de fracciones en la justicia y en los aparatos de inteligencia, no es ajena a la subordinación de esa inteligencia a servicios internacionales como la CIA o el Mossad, con los cuales hay establecida una subordinación de tipo semicolonial. Esta circunstancia no es el resultado de una “autonomía” de los servicios, sino de una política de estado que se expresó en el apoyo desde el gobierno de Néstor Kirchner a la llamada “política antiterrorista” iniciada por Jorge Bush. Como consecuencia de esos compromisos fue dictada y aprobada la repugnante “ley antiterrorista”, o el envío y mantención de tropas militares a Haití a cumplir las tareas de intervención en una nación hermana que tienen prohibidas en la Argentina.
Por todo ello no es casual el sostenimiento de César Milani al frente de la comandancia en Jefe del Ejército, un general de la dictadura, con procesos por crímenes de lesa humanidad. El papel de este general de inteligencia, con abultado presupuesto para los servicios que controla directamente, no es ajeno a la crisis de la SI que precedió a la denuncia de Nisman y a su muerte violenta antes de comparecer ante la Comisión Penal de Diputados.
Rechazamos la pretensión de distraer esta crisis con improvisaciones y fraudes como la ley en tratamiento exprés en extraordinarias, que constituye un intento de autoamnistía. Se trata ante todo de una maniobra política continuista. No sólo por el contenido de la ley, sino por la función política de simular una iniciativa transformadora que pasa la esponja a las responsabilidades en la crisis política planteada que rodea a la muerte del fiscal Nisman y su denuncia.
La perpetuación del personal, de los fondos reservados y de los “secretos de Estado”, en la nueva ley están abiertamente denunciados hasta desde el interior de las filas oficiales. Pero llamamos la atención que con el Proyecto X que espió a más de mil organizaciones populares por medio de la inteligencia de la Gendarmería operando desde Campo de Mayo, se violó la actual ley 25.520.
¿De qué puede servir una nueva ley cuando no se rinde cuentas de la violación de la anterior, cuando se gobernó con los carpetazos y causas contra el pueblo armadas por los servicios?
No compartimos tampoco los planteos que distraen en otro sentido, desde la oposición. El más notorio el que pretende hacer eje en la derogación del Memorando con Irán, un instrumento fracasado, anulado por la vida, porque jamás lo convalidó Irán. O el planteo de que la Corte se haga cargo de la causa Amia cuando la Corte es responsable de la impunidad del atentado de la Embajada. El Estado Nacional encubrió durante décadas a la conexión local de esos atentados y de ello deben rendir cuentas. Todas las fuerzas políticas en presencia que fueron gobiernos sucesivamente.
Insistimos antes todas las fuerzas políticas en la Interpelación al gabinete nacional, a Capitanich, a Randazzo, a Timmerman, a Berni, a Alak y a su turno a la presidenta Cristina Kirchner. Deben explicar a Stiuso, a Milani, al papel de Berni en la escena del crimen, la subordinación a los servicios extranjeros, el manejo de las cajas negras de la inteligencia, la llamada promiscuidad de los servicios con la Justicia, las contradicciones en la política exterior que surgen de la denuncia de Nisman, como todas las circunstancias que rodearon a la muerte del fiscal.
La apertura integral de los archivos de inteligencia es el único camino contra la impunidad y para atacar la corrupción de los servicios de inteligencia.