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| "Justicia por Maira" e "Hijos de puta, den la cara", gritan las veredas del Vecinal |
Lo cierto es que una chica de 23 años, Maira, fue a atenderse por un problema en su embarazo y terminó en una cama de terapia intensiva con respirador mecánico. “Y ni nosotros sabemos que pasa pues todo se mantiene en total hermetismo”, dice alguien del personal del Vecinal.
En estos momentos, con el (¿ex?) director uno, Antonio Brunetti de licencia médica; con el director dos Juan Moretti que va de vez en cuando por idéntico motivo; y el director tres, Alfredo Mocoroa que renunció, el hospital es manejado por un ex camillero, Claudio “Tato” Calviño, hoy “administrador” o “secretario”, al que La Defensa no halló a nadie -excepto su mami- que no lo cuestione. Pero aún tiene firma, el camillero al que todo el personal quiere sacar del poder de hacer compras. “Por ejemplo, van a entrar guantes por presupuesto pagados por el Ministerio de Salud, y el jefe no permite que salga el móvil a buscarlos y los compra a sus amigos. La madre continúa cobrando presentismo cuando hace más de un año que no viene a trabajar y nunca jamás pidió carpeta médica”, dicen las fuentes.
Y la última: Hoy en el Vecinal no hay comida para los pacientes pero van todos los capos - directores, ex directores, los secretarios, el secretario del secretario, todos- a comer al comedor. ¡Y no hay comida para lo enfermos!
Entretanto, los 24 concejales y el intendente de Lanús, de veraneo... permanente!
